Revierderby

                  Este es el nombre, en alemán, que reciben los derbis entre equipos de la región del Ruhr. Borussia Dortmund y Schalke 04, protagonizan el más mítico de todos ellos, ambos se vieron las caras por primera vez el 3 de mayo de 1925, con victoria para el Schalke por 4-2. Desde entonces, una rivalidad que dura más de 80 años, y que se sitúa sin duda alguna entre las mas fuertes de todo el planeta fútbol. Ambos equipos, en 1997, situaron a la región del Ruhr en boca de todo el panorama futbolístico. El Dortmund logró la Champions League, derrotando a la Juventus de Zidane por 3 a 1. El Schalke, por su parte, obtuvo la UEFA, ganando en la tanda de penaltis al Inter de Milan, tras quedar empate en el cómputo global de la final (fue la última que se disputó a doble partido). La extinta Recopa (que ganaría el Fútbol Club Barcelona), nos privó de una final de Supercopa de Europa que hubiese sido, sin duda, uno de los enfrentamientos más picantes en toda la historia del Revierderby.

Dortmund y Schalke, campeones europeos en el 97

                    Esta tarde, en el Signal Iduna Park, se jugó el derbi número 78 en Bundesliga. El empate a 0 ha provocado la igualada número 24. En cuanto a las victorias, cada uno ha ganado 27 partidos. Sin duda, la igualdad que ha existido a lo largo de la historia sorprende. Lo cierto es que el partido ha sido cualquier cosa, menos parejo. Salida en tromba de los locales, que obligaron al guardameta local, titular en la selección, Manuel Neuer, ha realizar dos paradas de mérito. Ni Götze ni Kuba estuvieron acertados en ambas acciones, a saber qué hubiese pasado de haberse puesto el Dortmund por delante en los primeros minutos. Los primeros compases dejaron, además, sonoras pitadas para Cristoph Metzelder. La afición que le idolatró, hoy no le podía perdonar su fichaje por el máximo rival. Aun queda en el recuerdo la visita del Real Madrid al antiguo Westfalenstadion el pasado 19 de agosto de 2009, y como "el muro amarillo" (Gelbe Wand), donde se unen los grupos de aficionados más acérrimos del club, le recibieron como un auténtico ídolo.

                           Metzelder no es el primero que va del Dortmund al Schalke. Se me viene a la memoria el caso de un mítico futbolista, uno de los grandes en los últimos tiempos en el fútbol alemán, Andreas Möller, que dejó el Dortmund por el Schalke en el año 2000. Volviendo al partido, la sensación que dejó el Dortmund fue la de un equipo muy superior a su rival, con confianza y las ideas claras. Las ocasiones se sucedían y Neuer seguía respondiendo bien, fue el mejor del choque. Sin duda, el meta del Schalke ya está instalado entre los porteros TOP del fútbol europeo, y le ha ganado la partida a su principal rival por defender la meta de la Mannschaft, Rene Adler. Los locales apenas notaron la baja de uno de los mejores centrales del campeonato, Subotic, puesto que ni Huntelaar ni Raúl llegaron a incomodar prácticamente a la pareja hoy titular, Hummels y Santana. Hummels es un central magnífico, un error del Bayern (Hummels es canterano del equipo bávaro), puesto que ahora mismo los de Van Gaal tendrían, probablemente, la pareja de centrales de la selección en el futuro (Badstuber sería su acompañante).

Neuer lo paró todo

                     El Dortmund encontraba espacios de manera eficaz, Bender es un mediocentro de apoyo y tácticamente correcto, al que Klopp ha dado continuidad y con el que está encontrando equilibrio, aunque el verdadero referente en la sala de máquinas es Nuri Sahin. Excelente visión de juego, un guante en su zurda, capacidad para jugar en horizontal y vertical con bastante eficacia, una de las perlas del mercado. El medio campo del Schalke no tuvo opción ante ellos. Hoy debutó el buen mediocentro ghanés, llegado del Rosenborg, Anthony Annan. Estuvo discreto, quizás superado por el flujo de juego de los locales, habrá que darle tiempo. Nada que ver con Rakitic por estilo, y, si juega con Kluge, en la parcela creativa, el Schalke sale perdiendo. Sin embargo con continuidad le puede dar equilibrio al equipo. Además el ghanés no es torpe con el balón, no se complica y juega bien en corto. Lo cierto es que preferiría verle con Jurado más centrado. Llama la atención que el gaditano, en el Atleti, no pudiese jugar en su posición más natural, por culpa de Agüero y Forlán, y ahora le sucede algo parecido, con Raúl y Huntelaar. En banda aporta cosas de manera intermitente, sin duda su mejor fútbol es entre lineas, o, en su defecto, como generador de juego, a pesar del hándicap físico.

Annan (izquierda) debutó ante el máximo rival de su nuevo equipo

                     Se llegó al descanso con el milagro del empate para el Schalke, y en la segunda mitad la cosa no cambió demasiado. El Dortmund seguía apretando, y salvo una ocasión de Farfán mediada la segunda parte, y un balón de Raúl a Jurado que acabó en parada de Weidenfeller, los visitantes no presentaron oposición. Barrios disparó al palo. Al argentino, con pasaporte paraguayo, se le ve falto de ritmo desde que volvió de la lesión, y el equipo necesita de su chispa, porque los rivales, de ganar mañana, empezarían a soñar con darles caza. Ahora mismo la distancia con el Leverkusen es +12, y con el Bayern +15 (ambos con un partido menos). Götze también disparo al palo en los instantes finales. Ya hemos hablado de Götze, pero merece la pena volver a hacerlo porque bajo mi punto de vista estamos ante un jugador celestial. Sus controles, elegancia, personalidad, y sentido del juego, son impropias de su edad. Estamos ante una estrella en ciernes, si no hay lesiones. Va para crack, para mi sin duda.

                    Podríamos hablar largo y tendido de este gran Dortmund, pero prefiero quedarme con esos detalles, o del Schalke (Magath esta semana ha sido criticado duramente por su afición), y no me extraña, 40 fichajes en los últimos 19 meses hacen que poca gente entienda qué le pasa la cabeza... En cualquier caso, a pesar del empate sin goles en el derbi, pudimos disfrutar del maravilloso ambiente, de un partido bastante abierto, y corroborar que si al inicio de la jornada, el Dortmund doblaba al Schalke en puntuación, no era fruto de la casualidad. Veremos si al alegre equipo de Jürgen Klopp, le basta con la ventaja actual para proclamarse campeón de la Bundesliga.