miércoles, 16 de mayo de 2012

La libreta de la Copa Libertadores 2012 (II): Los Cuartos

Me encanta la palabra "llave" dentro del contexto de la Copa Libertadores. Cinco letras que esconden los sueños de mucha gente, y las claves para conseguirlos.  Cuatro llaves, y detrás de la puerta, las semifinales. Ocho equipos pelean por el título más codiciado del continente. Están a punto de arrancar los cuartos de final de la Copa Libertadores:



El primer enfrentamiento de los cuartos de final pondrá frente a frente a dos 'outsiders', para las alturas en las que estamos. Quizá el rendimiento de la Universidad de Chile sorprenda menos, porque maravilló a todo el mundo con su espectacular Sudamericana, pero el hecho de que Libertad tenga serias opciones de ser semifinalista sí es significativo. Y es que la U llega con el grave problema de que Borghi (director técnico de la selección chilena) ha llamado hasta seis titulares (González, Rojas, Aránguiz, Díaz, Junior Fernandes y Mena) para las eliminatorias por el Mundial 2014, y podrían perderse el partido de vuelta.

Libertad: Equipo muy sólido, pero no por ello limitado con pelota. Burruchaga planta un 4-4-2 clásico en fase defensiva, abarcando mucho a lo ancho y con una gran armonía para encimar al jugador que recibe de espaldas. En ofensiva, Civelli y Aquino producen muchas recepciones por dentro, por lo que el esquema es bastante versátil a la hora de atacar. Un hueso durísimo por manejarse en varios registros.
Universidad de Chile: El equipo de Sampaoli es una de las sensaciones en Sudamérica. Con un estilo muy ofensivo, basado en un 3-4-3 muy dinámico, y una propuesta atractiva y valiente. Díaz-Aránguiz-Lorenzetti suma muchísima asociación por dentro, Rodríguez-Mena son puñales por fuera, y la última línea, encabezada por Henríquez (Fernandes será probablemente baja) es magnífica ofreciendo opciones para el último pase.


La eliminatoria está marcada por las convocatorias internacionales, así que tengo la sensación de que veremos un choque muy divertido porque la U, que ya de por sí afronta los partidos con mucha valentía, probablemente asumirá más riesgos ante la posibilidad de no contar con muchos de sus mejores hombres para la vuelta. Libertad se ajusta de maravilla en la fase defensiva, siendo Cáceres el hombre clave en medio campo. Aguanta la posición y se balancea para evitar desajustes cuando cualquiera de los futbolistas de medio campo abandonan el sitio para iniciar presión. Un 4-4-2 donde las líneas están muy juntas , Burruchaga ha conseguido que el equipo sea difícil de superar. Sin duda, la prueba de esa solidez contra la U es de máxima exigencia. Los de Sampaoli tienen mil alternativas. Díaz es un jugador excepcional, recepciones de categoría, inteligentes, y posterior acción que siempre le da ventaja al compañero. Si además, añades que le acompaña un futbolista como Aránguiz, muy combinativo, hace que la relación, recíproca, potencie virtudes de ambos. Lorenzetti se descuelga para cambiar el ritmo en el último tercio, mientras que Henríquez, el chico maravilla, ofrece un arsenal de desmarques que te dejan atónito para la edad que tiene (18 años). La baja de Junior Fernandes puede hacer entrar a Gallegos, jugador bastante contextual para el partido y la defensa que utiliza Libertad, más habilidoso en espacio reducido. Desde el punto de vista paraguayo, atacar con calidad debería ser la mayor arma defensiva de Libertad. Y es algo que puede hacer, porque lejos de ser un equipo únicamente basado en su estructura defensiva, tiene grandes argumentos para hacer daño. Al tremendo nivel a balón parado de Ayala y Samudio, hay que añadir la aportación en juego de Civelli y Aquino. Dos hombres versátiles, capaces de jugar abiertos o por dentro. Gran arma para Libertad, que podrá explotar el carril central cuando la U deje muchos hombres en campo contrario, o los carriles exteriores, cuando el repliegue de los chilenos sea correcto. A ello hay que añadir a Núñez, un segundo punta muy móvil que se equilibra de maravilla con Velázquez, un nueve que ejerce mucho de pivote y habilita cualquier carrera al espacio o apoyo de cara de sus compañeros.




Un duelo entre Rio de Janeiro y Sao Paulo en cuartos de final de Libertadores, desprende romanticismo por los cuatro costados. Dos equipos bastante pragmáticos, siendo Corinthians, quizá, el gran embajador del término dentro del fútbol brasileño. Duelo entre favoritos, sin duda. Corinthians por llevar la bandera de campeón del Brasileirao, y Vasco porque el potencial de alguno de sus futbolistas es realmente de primer nivel, pero sobre todo, y esto vale para ambos, porque son dos bloques muy sólidos.

Vasco: Cristovão suele utilizar un 4-3-3, aunque la naturaleza de Diego Souza estreche el módulo. Rômulo como eje del equipo, ofreciendo ayudas en fase defensiva y ofensiva, futbolista trascendental. La imaginación la han de poner Eder Luis y Diego Souza. El primero más dinámico y con salida hacia fuera, el segundo más preparado para pisar área. Alecsandro como '9' referencia.
Corinthians: Quizá el equipo más sólido de Sudamérica, con una brutal estructura defensiva gracias a su gran pareja de centrales y el doble pivote Ralf-Paulinho. Ralf para agilizar la base y mantener la posición, Paulinho para llegar y generar ventajas en el último tercio. Probablemente falta pegada y algo de imaginación en los metros finales, el gran debe del equipo. Necesita mucho de un Alex enchufado.

Sin ser el partido más marcado por las ausencias, la de Dedé en Vasco es quizá la más decisiva de todos los cuartos. Su dominio del espacio es brutal, y su facilidad para corregir cualquier acción es asombrosa. Uno de los mejores centrales del continente no estará y su equipo lo acusará. La gran exigencia a la que someterá la dupla Ralf-Paulinho, hace pensar que sea complicado que Cristovão junte a Felipe y a Juninho. Uno de los dos, acompañado por un interior que sea capaz de aguantar la ida y vuelta de Paulinho, es algo más probable. La aportación de Rômulo en la eliminatoria puede ser decisiva, porque es el mejor antídoto al motor de Corinthians. Dando un paso adelante, dos estructuras diferentes, donde creo que Corinthians sale mejor parado. Vasco tiene dos opciones evidentes en fase ofensiva, que son Eder Luis y Diego Souza, y que por lo general, siempre parten de las mismas zonas. La escasa versatilidad de los dos interiores impide permutas continuas. Esto, para una estructura defensiva tan sólida como la de Corinthians, debería resultar relativamente cómodo, aunque no hay que olvidar que Eder Luis y Diego Souza son dos jugadorazos. Quizá podamos hablar de unos automatismos débiles, sostenidos por bastante talento. La estructura ofensiva de Corinthians me parece más versátil. No habrá roles fijos, Emerson y Alex permutando, Danilo recibiendo por dentro. En ese sentido, Corinthians tiene unos automatismos de calidad para hacer daño, teniendo quizá, el mayor problema, en la escasa grandeza de futbolistas como Emerson Sheik o Jorge Henrique, que no son jugadores realmente diferenciales. Importancia de Alex, y sobre todo, de la ausencia de Dedé, para que Corinthians pueda convertir su propuesta (que a nivel de solidez y riqueza me parece la mejor que hay en la Copa), en buenos resultados.




Fluminense eliminó a Boca en las semifinales de 2008, y aunque La Bombonera temblaría de todas formas, puede que el recuerdo reciente haga que retumbe un poquito más. Flu fue capaz de eliminar a un, por aquel entonces, vigente campeón de la competición, y lo hizo enseñando al mundo a un Thiago Neves que asombró durante todo el torneo. A esta llave llegan con los papeles invertidos. Los brasileños como uno de los grandes aspirantes, y los argentinos con la sensación de estar lejos de dominar el continente como antaño, y con una liga local cada vez más devaluada.

Boca: Falcioni suele utilizar un 4-4-2, con un rombo estrecho en medio campo, donde Rivero y Erviti ofrecen recepciones interiores y sus laterales deben ser largos, sobre todo Clemente en izquierda. Riquelme consigue las recepciones en 3/4, desde allí, activa todos los desmarques, bien sean profundos, o bien sean apoyos para combinar. Una delantera Cvitanich-Mouche es movilidad pura.
Fluminense: Braga suele jugar en 4-2-3-1, pero las bajas, en algunos casos claves, hará que la constitución no sea exactamente esa en algunos momentos. Aun así, un equipo con un potencial tremendo en fase ofensiva. Thiago Neves y Sobis haciendo fuera-dentro, y permitiendo incorporaciones de dos laterales muy profundos como Bruno Vieira y Carlinhos. Rafa Moura es un delantero suplente de verdadero lujo (Fred es baja).


Realizada la puesta en escena, esta eliminatoria creo que está marcada por bajas muy importantes. En el caso de Boca, la de Somoza, futbolista que es capaz de ordenar al equipo en todos los aspectos, tanto en el momento de salida, con recepciones siempre cerca de la zona de peligro en caso de pérdida, como con una gran sensibilidad para ocupar el espacio correcto en el momento del repliegue. Su ausencia puede hacer que crezca la cantidad de recepciones de Thiago Neves y Sobis cuando vengan dentro. No está claro el sustituto de Deco, pero cualquiera de ellos tiene un perfil que influirá en el colectivo de forma parecida. Creo que las opciones serán Wagner, Lanzini o Marcos Junior. Ninguno de ellos va a recibir cerca de la base para combinar, ni parará el ritmo en el último tercio. Harán conducciones largas, y caerán a los costados para recibir más desahogados (sin descartar que durante muchos minutos, Neves permanezca en la mediapunta). Esto potenciará aun más el problema de no tener a Somoza, porque Neves-Sobis querrán oxígeno dentro. Sin embargo, la baja de Deco, a pesar de permitir explotar una carencia rival de otra manera, debería hacer mucho daño a Fluminense. En primer lugar, porque el equipo pasará a defender muchas veces en 4-2-4, ya que su sustituto va a ser más dinámico, por lo que la pérdida hará que Rivero-Erviti-Riquelme tengan facilidad para encontrar superioridad posicional en medio campo. La interpretación en el momento de achicar de Edinho-Diginho (aunque no debemos descartar la opción de Jean), será clave para que Riquelme no pueda recibir con tiempo y activar los numerosísimos desmarques que tirarán Mouche y Cvitanich (hecho que haga que la baja de Silva, no sea tan dramática).






Si antes hablábamos del Vasco - Corinthians como un partido que bien podríamos considerar el paradigma de lo pragmático, este enfrentamiento entre Vélez y Santos es, probablemente, su antítesis en estos cuartos de final. Dos equipos que nos han hecho disfrutar en los últimos tiempos por dinamismo, talento, alegría y frescura. Si bien es cierto que el bloque argentino no tiene la lucidez que enseñó de la mano de los Moralez o Ricky Álvarez, el estilo permanece y por momentos los de Gareca encuentran momentos de gran fútbol.

Vélez: El sistema de base que utiliza Gareca es un 4-3-1-2, pero lo cierto es que Vélez se encuentra en muchos momentos en un 4-2-3-1 asimétrico. La profundidad de Augusto Fernández y las recepciones del burrito Martínez abierto a izquierda desfiguran el esquema, consiguiendo ser un equipo bastante versátil y dinámico. Veremos cuanto afectan una serie de bajas bastante importantes.
Santos: Caso parecido al de Vélez, Santos vive muchas veces en un 4-2-3-1 asimétrico, por el ida y vuelta de Elano, que le permite aparecer por dentro y por fuera, y por la anarquía de Neymar, que aunque produce más recepciones acostado sobre izquierda, lo cierto es que aparece por cualquier zona del campo. Los mayores problemas que tiene Santos, tienen que ver con sus concesiones en el carril central.


Hablábamos de las bajas de Vélez, y es que ni Ortiz, ni Pratto, ni Insúa, ni Tobio podrán jugar el partido de ida. Sin duda, muy relevantes. En primer lugar porque Cubero, el polivalente capitán de Vélez, tendrá quizá, que jugar de defensa central. No está el acompañante habitual de Domínguez, Ortíz, y se especula con que entre Peruzzi como lateral diestro para que Cubero vaya al medio. Esto significa que en la zona donde Neymar recibe más veces, pierdes a un futbolista capaz de medir bien la acción, y eso para ocuparse de Neymar, es clave. Teóricamente, el triángulo que debe controlar a Neymar lo conformarán Peruzzi-Cerro-Augusto Fernández, y a mi no me parece lo más sólido para enfrentarse a semejante gigante. Quizá un buen mecanismo para Vélez deba ser obligar a Santos que inicie sobre su derecha, para jugar en fase defensiva girado sobre ese sector, de modo que sea complicado para los brasileños generar aclarado para Neymar. Complicado teniendo en cuenta el trabajo que eso exigiría al burrito Martínez. Precisamente en él debe recaer explotar la carencia de Santos. Su naturaleza es recibir en izquierda, es donde él se siente cómodo y desde donde es más decisivo, pero la pareja Durval-Dracena no puede sostener la anarquía de Arouca, y en ese pasillo interior es el lugar donde es probable que el futbolista más talentoso de Vélez pueda ser determinante. Además, contará con Óbolo, que empujará a los centrales a la frontal y puede generar todavía más tiempo a Martínez. Por último, la probabilidad de que Kardec entre en lugar de Borges es alta, pero pienso que sería inteligente en Liniers utilizar un arma como Borges, que estire con sus desmarques a un Vélez que tiene recursos para dominar bastante tiempo territorialmente.

Un enorme agradecimiento a Alberto Zaragoza (@albertigues en twitter), por su colaboración desinteresada con la actualidad de los equipos brasileños.