lunes, 30 de junio de 2014

Análisis de partidos: Francia 2-0 Nigeria

1. Contexto y datos del partido


Partido de octavos de final. Francia 2 (Pogba, Yobo -pp) - Nigeria 0

Datos del partido (Fuente: squawka)

Francia llegaba al choque tras haber liderado su grupo, ante Suiza, Ecuador y Honduras. El combinado de Deschamps jugó una muy buena primera fase, dejando grandes sensaciones en sus dos primeros partidos, e incluso en el tercero, frente a Ecuador, en el que empató a cero, mostró algunos tramos de gran competitividad. Nigeria, por su parte, dejó muchas dudas en el partido inaugural ante Irán, pero algunos buenos contraataques ante Bosnia en la segunda jornada le permitió llevarse los tres puntos y acceder a los octavos de final.

2. Planteamientos

Didier Deschamps hizo alguna variación en la alineación de Francia, no ya con respecto al partido frente a Ecuador, donde entraron algunos suplentes, pero sí con respecto a las dos primeras jornadas. La defensa fue la habitual salvo un cambio obligado, con Lloris en portería, Debuchy lateral derecho, Evra lateral izquierdo, y pareja de centrales compuesta por Varane, y Koscielny, que entró en el once debido a los problemas físicos de Sakho. En medio campo, Cabaye jugó como mediocentro, con Pogba, al que el seleccionador francés eligió por delante de Sissoko, como interior derecho, y Matuidi en el interior izquierdo. En ataque, Deschamps volvió a elegir a Giroud como 9, quedando a sus lados Valbuena -derecha- y Karim Benzema -izquierda-. 

Keshi, por su parte, volvió a ubicar a Nigeria en el 4-2-3-1 que está utilizando de manera habitual durante el torneo, con el único cambio de Moses, que entró por el lesionado Babatunde. Así, las águilas verdes formaron con Enyeama en portería, Ambrose -derecha- y Oshaniwa -izquierda- como laterales, y pareja de centrales compuesta por Yobo y Omeruo. En medio campo, el doble pivote titular, con Onazi y Obi Mikel. Por delante, Moses no se fue a un costado, y entró en la posiciónd e Babatunde como mediapunta, manteniéndose Odemwingie como extremo derecho y Musa en el perfil izquierdo, y siendo el 9 del equipo el delantero centro titular, Emmanuel Emenike. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Nigeria sufrió mucho ante Irán en su debut, en un partido en el que los asiáticos les exigieron pasar mucho tiempo atacando en posicional, problema ante el cual a los de Keshi les costó encontrar respuestas. Sin embargo, frente a Bosnia y Argentina, cuando pudieron correr, mostraron su cara más peligrosa, gracias a la tremenda velocidad de Musa y Emenike. Era, por tanto, lógico creer que la actitud nigeriana fuese la de intentar juntarse en campo propio, para transitar con velocidad, buscando la espalda de la defensa francesa. Quizá este fue el pensamiento de Didier Deschamps a la hora de hacer la alineación, al decantarse por Giroud, un hombre más productivo en ataques posicionales largos, por delante de Griezmann, un futbolista más capacitado para atacar el espacio. Además, con Benzema y Valbuena sueltos teniendo una referencia fija en el área, la circulación podría ser de más calidad, lo que limitaría esas opciones de contragolpe de los nigerianos. Sin embargo, durante los primeros 60 minutos de juego el partido se movió en otro escenario. 

Nigeria salió con una actitud muy agresiva, adelantando sus líneas y mostrando, además, un gran acierto con pelota en campo rival. Eso la hizo vivir bastante tiempo en terreno francés, y obligó a los europeos a atacar en transición constantemente. Fue entonces cuando la alineación de Giroud no terminó de ser efectiva, ya que mandaba a Benzema al perfil izquierdo, lugar que cerraba bien Nigeria con el triángulo Odemwingie-Onazi-Ambrose, y sobre todo porque los movimientos del punta del Arsenal eran casi siempre de apoyo, por lo que a Benzema no le quedaba espacio para tocar la pelota en zonas interiores. Fue Valbuena, en ese primer tiempo, el que de verdad ofreció toques decisivos, muy acertado en sus movimientos, tanto interiores como pegados a la cal, y relacionándose bastante bien con el interior de su perfil, Pogba.

Pases de Benzema y Valbuena en el primer tiempo (Fuente: squawka)

Este dinámica permaneció en el segundo tiempo, hasta que se produjeron dos cambios importantes: Griezmann entró en el lugar de Giroud, y Onazi tuvo que retirarse por lesión. Fue entonces cuando el combinado francés comenzó a mostrarse productivo con pelota. Benzema se deslizaba hacia ambos perfiles, mostrando toques precisos, y liberaba la zona central para que pudieran jugar de cara y con espacio Matuidi, y sobre todo Pogba, que creció con el paso de los minutos. A esa modificación colectiva se unió el nervio de Griezmann, que comenzó a agitar a la zaga nigeriana con sus toques y sus movimientos más verticales y eléctricos. El tramo final de Francia fue muy superior, y al final un error de Enyeama -que tuvo una actuación bastante radical, francamente bien en los disparos frontales y unos contra uno, y muy floja en las pelotas colgadas- significó el 1-0 de Pogba. A Nigeria le costó después, ya sin Onazi, ser productiva en ataque, y Francia cerró el partido con el 2-0. En resumen, Nigeria sorprendió porque salió a jugar sin ningún miedo, en campo contrario y con bastante acierto con balón, lo que puso en problemas a una Francia que no estaba preparada, a través de su alineación, para resolver este problema. La entrada de Griezmann modificó la estructura de ataque en Francia y les hizo mejorar, hasta que finalmente cayeron los goles que clasifican a los de Deschamps para los cuartos de final.

4. Reacciones de los protagonistas

Didier Deschamps (Fuente: fifa.com): “Nigeria ha jugado de forma muy física, aportando mucha densidad al juego. Era un reto al que había que hacer frente, y lo hemos aceptado. Durante una hora estábamos codo a codo, pero Francia fue capaz de tomar la delantera durante la última media hora. Los nigerianos estaban cansados. Luego dejaron espacios en defensa... Hemos sabido mostrarnos dinámicos y rápidos en el momento adecuado, cuando Nigeria bajaba el ritmo. Esta victoria merecida nos hará más fuertes para lo que viene a continuación. Estoy muy orgulloso de haber alcanzado los cuartos de final”.

Stephen Keshi (Fuente: fifa.com): “Todas las derrotas son dolorosas, y en particular cuando los jugadores aplican bien las consignas y juegan bien como contra Francia. No merecíamos perder, pero el fútbol es así, y debemos aceptarlo. Ahora se trata de mirar hacia delante y pasar a otra cosa. No tiene mucho sentido buscar culpables. El equipo juega, gana o pierde en su conjunto. Quiero dar las gracias al público brasileño por su apoyo en cada uno de nuestros encuentros. No podría haber esperado nada mejor por su parte”.  

Análisis de partidos: Costa Rica 1-1 Grecia

1. Contexto y datos del partido

Partido de octavos de final: Costa Rica 1 (Bryan Ruiz) - Grecia 1 (Sokratis). Victoria de Costa Rica (5-3) en la tanda de penaltis.

Datos del partido (Fuente: squawka)

Costa Rica llegaba al choque de octavos habiendo hecho, en la primera fase, una gesta para la historia de la competición, después de haber sido líder en un grupo con Italia, Uruguay e Inglaterra. Grecia, por su parte, consiguió acceder en la fase de octavos en el último instante de la última jornada, tras batir en el descuento a Costa de Marfil.

2. Planteamientos

Jorge Luis Pinto, como no podía ser de otra manera, mantuvo el dibujo habitual que le había llevado a sorprender a todo el mundo después de su inesperado pase a la segunda ronda. De esta forma, Costa rica mantuvo ese 5-2-3 -hoy se definió más al estar más tiempo en campo rival con respecto a otros días, donde Ruiz y Bolaños juegan en la misma línea que Tejeda y Borges-. Keylor Navas en portería, con la línea de tres centrales habitual formada por Duarte en derecha, González en medio y Umaña en izquierda, bandas para Gamboa -derecha- y Díaz -izquierda-, doble pivote para Tejeda y Borges, con Bryan Ruiz partiendo de derecha y Bolaños en izquierda en la línea posterior, y Joel Campbell actuando como delantero centro.

Fernando Santos, por su parte, utilizó la misma variante que vimos ante Costa de Marfil, aunque con algunos matices interesantes. Grecia formó en un 4-2-3-1, con Karnezis en portería, Torosidis lateral derecho y Holebas lateral izquierdo, y con la pareja de centrales habitual, formada por Manolas y Sokratis. En medio campo, Samaris, al que vimos más suelto frente a Costa de Marfil tras la lesión de Kone, entró para formar en doble pivote con Maniatis, situándose Karagounis por delante. En bandas jugaron Salpingidis -derecha- y Lazaros -izquierda-, mientras que Samaras repitió como delantero centro, en detrimento de Mitroglou, que volvió a quedar en el banquillo.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Costa Rica tuvo que afrontar un tipo de partido con el que hasta ahora no se había encontrado. En la fase de grupos, Italia, Inglaterra y Uruguay le habían permitido tener espacios tras el robo, pero Grecia no dudó en adaptarse a las circunstancias y limitar los mejores recursos del combinado centroamericano. Fernando Santos hizo que Grecia cerrase los espacios interiores, donde mejor se estaban desenvolviendo Bryan Ruiz y Joel Campbell, y durante el primer tiempo a los ticos les costó encontrar soluciones ofensivas. Incluso la profundidad que solían aportar Gamboa y Díaz estaba siendo limitada por el buen trabajo de Salpingidis y Lazaros, y el dominio griego terminó de mostrarse cuando, además, consiguieron desplegarse con cierta continuidad. Costa Rica no profundizaba, y Grecia tras robar puso en funcionamiento un buen mecanismo de contraataque. Samaras, que jugaba de 9, comenzó a ofrecer apoyos de gran calidad y Grecia, sobre todo en el sector izquierdo, con Lazaros y Holebas, comenzó a hacer daño a Costa Rica. Un enorme Keylor Navas dejó el 0-0 en el marcador. 

El primer nombre propio de Costa Rica fue su guardameta, pero hay un segundo que empezó a ser absolutamente decisivo: Joel Campbell. Sus controles y su facilidad para hacer del siguiente gesto un movimiento productivo y vertical hicieron que Costa Rica comenzase a generar peligro, y así llegó el 1-0, tras una buena llegada de Bryan Ruiz a zona de remate. El marcador a favor de los ticos y la expulsión de Duarte llevaron a Fernando Santos a modificar su planteamiento. Grecia pasó entonces a jugar en 4-4-2, con la entrada de Mitroglou por Samaris, pero el combinado heleno perdió algo de claridad para llegar de forma organizada, y el recurso comenzó a ser llevar la pelota a banda, principalmente con Holebas y Lazaros, y meter centro al área. Fue entonces cuando Pinto reorganizó al combinado costarricense en 4-4-1, de forma que había dos hombres en banda que limitaban las progresiones exteriores de los griegos. Así Costa Rica comenzó a detener un centro lateral adelantado que cogía en superioridad posicional a los puntas griegos dentro de su área, y además conseguía, de vez en cuando, ir cogiendo aire gracias a la brillantez y autosuficiencia de Joel Campbell. En ese momento de indeterminación comenzó a aparecer el futbolista que se puso a llevar el peso del juego griego: Giorgios Samaras. 

Samaras en el partido -izquierda mapa de calor, derecha pases- (Fuente: squawka)

El futbolista del Celtic se adueñó en ese momento del encuentro. Retrasó su posición y comenzó a ser el organizador del equipo, teniendo una tremenda influencia en todas las acciones ofensivas. Con pases en campo propio, conducciones, atrajo rivales, dividió la defensa, y tomó buenas decisiones a la hora de abrir sobre la banda para encontrar a Holebas, jugar hacia posiciones interiores o simplemente ayudar a agilizar la circulación. Grecia se asentó desde entonces con más calidad en campo rival, y al final, en un balón al área, acabó llegando el empate. Durante la prórroga Grecia no atacó con tanta claridad en comparación a ese tramo final de partido, y las llegadas fueron resueltas por un gigante Keylor Navas, que terminó de ser el héroe costarricense cuando en la tanda de penaltis le detuvo a Gekas el lanzamiento decisivo. En resumen, Grecia puso en serios apuros a Costa Rica en el primer tiempo, aunque la calidad individual de los ticos focalizada en las figuras de Navas, Campbell y Ruiz, permitieron a los de Pinto ponerse por delante. El empuje griego llevó al empate, pero el plan ofensivo no se pudo imponer ante los 10 organizados costarricenses, que acabaron haciendo historia con la clasificación a cuartos en la tanda de penaltis.

4. Reacciones de los protagonistas

Jorge Luis Pinto (Fuente: fifa.com): "Este es un resultado trascendental, y no hay palabras para describir lo que siento ahora mismo. Nunca es fácil jugar con 10 hombres, y menos ante un rival así en un Mundial. Tuvimos seguridad durante el partido, pero además mucha confianza en los penaltis, tanto en nuestro arquero, que es extraordinario, como en los pateadores, que estuvieron perfectos. Repito, estamos felices y le dedicamos la clasificación a todo el pueblo de Costa Rica. Nos hubiera gustado jugar el clásico con México, y respetaremos a Holanda como respetamos a todos nuestros rivales. Esto sigue y vamos por más".

Fernando Santos (Fuente: fifa.com): "No me gusta hablar de suerte o falta de suerte. Esto tenía que quedar en manos de alguien, fue de ellos y por eso los felicito. Creo que Costa Rica fue superior durante los primeros 15 minutos, pero luego balanceamos el partido. Después del gol nosotros debimos arriesgar más, el rival se defendió bien e intentó contraatacarnos, pero logramos enviar el partido a tiempo suplementario. Ahí, si bien los presionamos, nos faltó lucidez, pero es entendible cuando hay cansancio y tensión. ¿Navas? Fue brillante: sin él, el resultado hubiera sido otro".

domingo, 29 de junio de 2014

Análisis de partidos: Países Bajos 2-1 México

1. Contexto y datos del partido

Partido de octavos de final. Países Bajos 2 (Sneijder, Huntelaar -p-) - México 1 (Gio dos Santos)

Datos del partido (fuente: squawka)

La selección holandesa llegaba al partido de los octavos de final con muy buenas sensaciones tras liderar el Grupo B, y habiendo ganado en la última jornada a Chile. México también llegaba con la moral por las nubes, después de ser segunda en el grupo de Brasil, al que no adelantó en la clasificación únicamente a consecuencia de a diferencia de goles. 

2. Planteamientos

Louis van Gaal volvió a formar con el 5-3-2 que viene utilizando en esta Copa del Mundo, aunque introdujo la variación de Verhaegh por Janmaat, y se decantó por Wijnaldum en lugar de De Guzmán. Así, los Países Bajos salieron con Cillessen en portería, defensa para de Vrij como central derecho, Vlaar como central medio y Blind como central izquierdo. Las bandas fueron para Verhaegh, que jugó como carrilero derecho, y Kuyt, que lo hizo en el perfil izquierdo. En medio campo, doble pivote para Wijnaldum y de Jong, con Wesley Sneijder unos metros por delante, y Robin van Persie y Arjen Robben formaron la delantera.

El piojo Herrera, por su parte, no hizo ninguna modificación significativa en el once que venía alineando a lo largo del torneo, y únicamente la obligada baja por sanción del gallito Vázquez hizo que entrase en la alineación Salcido. Así, con el 5-3-2 habitual, México se dispuso con Ochoa en portería, defensa de tres centrales con el Maza Rodríguez en derecha, Héctor Moreno en izquierda y Rafa Márquez en el centro, con Aguilar como carrilero derecho y Layún en el perfil izquierdo. Por delante, Salcido jugó como mediocentro ante la mencionada baja de Vázquez, con Herrera en su posición habitual de interior derecho y Guardado en izquierda. En ataque Gio dos Santos se movió como segundo punta, mientras que Oribe Peralta fue el delantero centro. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

México entró mejor al partido desde un primer momento, también motivado por un tempranero cambio en la selección holandesa que obligó a Louis van Gaal a modificar sus planes: Nigel de Jong tuvo que retirarse, lesionado, cuando aún no se habían cumplido los 10 minutos de partido. El técnico holandés se decantó por Martins Indi para sustituir al centrocampista del Milan, lo que llevó a Daley Blind a jugar en el doble pivote. El hombre del Ajax se vio muy superado, tanto por los movimientos de apoyo de Gio dos Santos, como sobre todo, con la brillante actuación de Héctor Herrera, que supo cuando moverse a su espalda para producir acciones cerca del área rival. México, además, conseguía dañar a Holanda con movimientos verticales, principalmente de Layún. Como ha venido siendo habitual a lo largo del torneo, la selección holandesa acompaña a los centrocampistas y adelanta metros para achicar espacios, pero México conseguía, a través de su carrilero izquierdo, encontrar profundad y generar situaciones de peligro. La superioridad de México en el primer tiempo se completó con un buen trabajo después de la pérdida. Holanda se había mostrado (España y Chile) como un equipo con un contragolpe devastador, pero los mexicanos supieron cerrarse bien sobre la carrera de Robben, y esto, sumado a una actuación pobre de Sneijder y van Persie, hizo que los de van Gaal apenas pudieran desplegarse durante el primer tiempo.

En la segunda mitad las sensaciones fueron parecidas, hasta que México aprovechó esa debilidad de Blind como pivote izquierdo para que Gio dos Santos ganase algo de espacio y, tras un fantástico disparo, poner el 0-1 en el marcador. Fue tras ese gol cuando van Gaal reaccionó, y la modificación táctica inclinó el campo hacia la meta de Ochoa, momento en el que los Países Bajos comenzaron a producir ocasiones con continuidad. Holanda pasó a jugar en 4-3-3, con Robben abierto sobre la derecha y Memphis Depay en la izquierda. Kuyt pasó a ser lateral derecho y Martins Indi izquierdo. Robben no estaba terminando de aparecer como punta porque estaba bien controlado, pero en el momento en el que pudo empezar a jugar con la portería de cara gracias al pase lateral sobre la derecha, y con Kuyt fijando la posición de Layún, destrozó a México. Conducciones, regates hacia dentro y hacia fuera, su productividad subió como la espuma y con ella, Holanda empotró a México contra su portería. El empate llegó tras un córner, y el 2-1 en un penalti que forzó el futbolista del Bayern. En resumen, México hizo un primer tramo de partido superior, tanto en ataque, como en fase defensiva controlando a Robben. Tras el gol encajado y el cambio táctico de van Gaal, en el que activó a su estrella, Holanda comenzó a producir acciones ofensivas hasta que le dio la vuelta al marcador.

4. Reacciones de los protagonistas

Louis van Gaal (Fuente: AS): "Los jugadores mostraron que tenían fe y que querían ganar hasta el final. La humedad no jugaba a nuestro favor, pero hasta el último minutos estuvimos luchando. Físicamente estuvimos tan bien que creo que hay que rendir un homenaje a los jugadores. Este triunfo nos va a dar mucha confianza".
"Aproveché la pausa de hidratación para cambiar al 4-3-3 y desde entonces creamos muchas más oportunidades. Desde entonces estuvimos mejor y Ochoa hizo grandes paradas. Es una manera inteligente de aprovecharlas. Tuvimos más posesión que en otros partidos anteriores. Los mexicanos no ejercieron tanta presión como los chilenos o los australianos y eso nos permitió dominar más".
"Vamos a ver al siguiente contrincante y veremos qué es lo mejor. No sólo tiene que ver con nosotros, sino con lo que hagan los demás. Es un gran cumplido poder cambiar de sistema y que los jugadores lo asimilen de esta manera. Con el 4-3-3 tuvimos a Kuyt en el lateral y jugamos el uno contra uno con Robben porque sus laterales estaban más desplegados. Pudimos marcar antes".

Miguel Herrera (Fuente: AS): "Queríamos tener salida por la banda, tener más salida con Aquino. Nos faltó un poco de oficio, que en los últimos minutos se acabe el partido y no se juegue más. Debíamos haber hecho lo que los equipos grandes hacen".
"Un equipo corría más, pero nosotros teníamos más aire. Cuando cae su primer gol no nos estaban presionando mucho. Nos faltó oficio. No era la Holanda que todo el mundo hablaba, México la maniató y demostró que es un equipo vulnerable. Lo que va contra el futbol no son las pausas para la hidratación, es jugar en este clima. Con este calor a cualquier equipo se le rompe el ritmo".

Análisis de partidos: Colombia 2-0 Uruguay

1. Contexto y datos del partido


Partido de octavos de final. Colombia 2 (James Rodríguez x2) - Uruguay 0

Datos del partido (Fuente: squawka.com)

Colombia llegaba al choque después de haber ganado sus tres partidos en la fase de grupos, y dejando buenas sensaciones en tramos importantes de todos ellos. Uruguay, por su parte, afrontaba el choque tras el duro golpe que supuso la sanción de Luis Suárez tras su mordisco a Chiellini, aunque deportivamente venía con el ánimo al alza tras recuperarse de la derrota en la primera jornada ante Costa Rica, y vencer a Inglaterra e Italia de manera consecutiva.

2. Planteamientos

Pekerman volvió al 4-2-2-2 que le vimos utilizar durante toda la fase de clasificación, y que se tambaleó después de la lesión de Radamel Falcao. El buen partido de Jackson Martínez en la última jornada de la fase de grupos ante Japón hizo al técnico argentino decantarse por el punta del Porto por delante de Ibarbo. Así, Colombia salió con Ospina en portería, Zúñiga lateral derecho, Armero lateral izquierdo, y Zapata y Yepes como pareja de centrales. En medio campo, doble pivote con Carlos Sánchez y Abel Aguilar, con Cuadrado y James Rodríguez más sueltos en un escalón posterior, y la pareja de puntas, novedad en el mundial, formada por Teo Gutiérrez y Jackson Martínez.

Óscar Washington Tabárez, por su parte, repitió el esquema que vimos ante la selección italiana, con defensa de tres centrales aunque introduciendo la variación de Maxi Pereira por Lodeiro, y la obligada de Forlán por Luis Suárez. Uruguay, por tanto, formó con Muslera en portería, línea de tres centrales compuesta por Giménez -derecha-, Godín -centro- y Cáceres -izquierda-, con Maxi Pereira como carrilero derecho y Álvaro Pereira en izquierda. En medio campo, Arévalo Ríos hizo de mediocentro, con Álvaro González como interior derecho y el cebolla Rodríguez en el perfil izquierdo, mientras que la delantera fue para Cavani, en un rol de segundo punta, y Forlán, que actuó como delantero centro. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El tramo inicial de partido no fue en absoluto cómodo para la selección colombiana, que se encontró ante un planteamiento uruguayo de repliegue bajo y pocas concesiones. Era lo esperado, pero durante la primera media hora de encuentro lo único que dejó Colombia en campo rival fueron las recepciones de Cuadrado, que a pesar de no tener espacio ni a nadie cerca con quien combinar, simplemente regateando generaba alguna ventaja. A Uruguay, sin embargo, le costaba desplegarse, y solo encontraba en Cavani algún apoyo que le diese tiempo al equipo a salir. Con Forlán como 9, las recuperaciones muy lejanas de portería hacían que encontrar a un hombre que ofreciese profundidad con un movimiento largo a los espacios resultase prácticamente imposible. Había igualdad, eso sí, hasta que James Rodríguez se inventó el gol del torneo. Una pelota volaba sobre la corona del área cuando el del Monaco, de espaldas a portería, la amoldó con el pecho y de zurda sacó un remate para la historia. A partir del 1-0 Colombia comenzó a encontrar mayor ritmo en sus acciones ofensivas, y James y Cuadrado empezaron a tener protagonismo en los ataques posicionales. 


Mapa de calor de Cuadrado y James (Fuente: squawka.com)

A pesar de tener la ventaja en el marcador, Colombia salió en el segundo tiempo con la misma actitud: jugar en campo rival y aprovechar la creatividad de esa pareja de 3/4 que tanto estaba produciendo. Así, en una brillante acción colectiva encontró el 2-0 y Tabárez tuvo que mover ficha con las entradas de Gastón Ramírez y Stuani. La dinámica del partido, y el resultado, hizo que Uruguay pasase a jugar más tiempo en campo rival, e incluso ante ese escenario Colombia volvió a ofrecer recursos para ser productiva. Con los apoyos y continuaciones de Teo, el cuerpeo de Jackson -que impidió a Godín ser tan dominante como vimos, por ejemplo, ante Italia- y sobre todo, la velocidad y verticalidad de Cuadrado. Con espacios Colombia también amenazaba. En resumen, Uruguay aguantó bien hasta que James Rodríguez dibujó un golazo de bandera, momento a partir del cual Colombia comenzó a encontrar su ritmo con pelota. Con 2-0, los cafeteros mostraron también opciones para producir acciones ofensivas con espacio para correr. Mientras que a Uruguay le costó atacar en transición y en posicional, Colombia mostró recursos para hacerlo de una y otra forma.

4. Reacciones de los protagonistas

José Pekerman (Fuente: fifa.com): "Quiero felicitar a toda Colombia porque se merecía eso. Hicimos ajustes porque sabíamos de la fortaleza de nuestro rival. Es muy importante conocer a tu oponente. Ellos saben manejar muy bien los tiempos en estos paritdos. El factor principal fue el primer tiempo en el que el equipo estuvo muy sólido y logramos desequilibrar. Tuvimos mucho protagonismo, manejamos bien la pelota con habilidad y movimiento. En el segundo tiempo, sabíamos que Uruguay iba a apretar y contragolpeamos rápido que es importante. Tuvimos que retrocer pero lo hicimos con tranquilidad y controlando la situación. Es importante tener un jugador como James Rodríguez que venía con mucha confianza del anterior partido. Es importante que un jugador tan joven tome tanta responsabiliad y nos dé tan buen rendimiento".   

Óscar Tabárez (Fuente: fifa.com): "Sabíamos que Colombia tenía un muy buen equipo, con posesión colectiva del balón y muy buenos jugadores que aportan al equipo. En el primer tiempo impusieron su ritmo y sufrimos uno de los mejores goles de este torneo. En la segunda mitad, cometimos errores y concedimos otro gol. Ahí tuvimos que asumir riesgos para buscar el descuento pero nos encontramos con un arquero que tuvo una actuación extraordinaria y no nos permitió volver a entrar en el partido. Pero estoy orgulloso de estos jugadores porque demostraron otra vez actitud y lo dejaron todo".

sábado, 28 de junio de 2014

Análisis de partidos: Brasil 1-1 Chile

1. Contexto y datos del partido


Partido de octavos de final. Brasil 1 (David Luiz) - Chile 1 (Alexis Sánchez). Victoria de Brasil (3-2) en los penaltis.


Datos del partido (Fuente: squawka)


Brasil llegaba al partido de octavos habiendo dejado ciertas dudas en la fase de grupos, sobre todo en el partido de la segunda jornada contra México, y en un tramo de la primera parte ante Camerún en su último partido. Aún así, era el gran favorito para este partido. Chile, por su parte, llegaba tras caer derrotada frente a los Países Bajos en la última jornada del Grupo B, aunque con buenas sensaciones después de su solvente victoria ante España

2. Planteamientos


Brasil salió con el 4-4-2 que vimos en la primera jornada frente a Croacia, aunque con la variante de Fernandinho por un Paulinho que no ha terminado de funcionar a lo largo del torneo. Así, jugó en portería Julio Cesar, con la defensa habitual compuesta por Dani Alves -derecha- y Marcelo -izquierda- como laterales, y la pareja de centrales asentadísima formada por Thiago Silva - David Luiz. En medio campo, doble pivote con Luiz Gustavo, más fijo en su posición, como suele ser habitual, y Fernandinho a su lado algo más suelto. En bandas, a pie natural, Oscar ocupó el perfil derecho y Hulk el izquierdo, con Neymar totalmente liberado partiendo desde el carril central, y Fred, como es habitual, como delantero centro. 

Sampaoli, por su parte, ubicó a Chile en un 3-4-1-2, con la defensa de tres centrales que se ha asentado después del partido de debut ante Australia. El técnico argentino salió con Bravo en portería, y defensa compuesta por Silva -derecha-, Jara - izquierda- y Gary Medel -centro- como centrales. En las bandas, actuando como carrileros, Isla en derecha y Mena en izquierda. En medio campo En medio campo esta vez formaron Díaz y Aránguiz en doble pivote, para adelantar a Vidal, que tuvo un rol muy importante, mientras que Aléxis Sánche y Edu Vargas, su pareja de puntas, jugaron abiertos para buscar los espacios laterales. 

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Brasil hizo un primer tramo de partido realmente sólido. Muy agresivo en la presión, conseguía asentarse en campo rival, recuperar rápido y seguir atacando. Durante esa primera parte hubo muchas acciones en las que el juego directo sobre Fred resultaba efectivo, porque se anticipaba a Medel y dejaba a Neymar en uno contra uno frente a Silva, donde el futbolista del Barcelona estuvo realmente desequilibrante. No terminó de definir bien esas acciones Brasil, pero salían con cierta continuidad y para Chile no era cómodo desplegarse. Sampaoli, con Alexis Sánchez y Edu Vargas abiertos, quizá buscaba atacar la espalda de Alves y Marcelo, que venía siendo el principal punto débil del combinado de Scolari. Sin embargo, Chile no consiguió tener un apoyo en campo propio para lanzar a sus puntas, y su forma de llegar a portería rival fue apretando la salida de pelota brasileña. Ahí es donde el papel de Vidal fue importante, ya que Brasil no tenía claridad cuando salía desde atrás, y el de la Juventus ofreció robos a buena altura. Por eso, la actitud agresiva de Chile en esa fase del juego fue clave, y le llevó a poder marcharse 1-1 al descanso. 


En el segundo tiempo la situación cambió, porque Chile se había dado cuenta de cómo hacer daño a Brasil, y Sampaoli extremó el planteamiento. La idea de ser profundo por bandas con Alexis Sánchez y Vargas no estaba funcionando, pero sin embargo conseguía atacar con robos en campo rival. Así, Chile le dio mucha altura a sus hombres e hizo un gran trabajo sobre Alves, Marcelo y Luiz Gustavo, pero con la entrada de Gutiérrez por Vargas tenía un centrocampista más para mover la pelota una vez recuperada. Durante el segundo tiempo Chile robaba, se asentaba en campo rival y seguía atacando. Brasil apenas salía, Neymar estuvo realmente desaparecido en esa segunda mitad, y solo alguna conducción de Hulk llevó peligro al arco de Bravo. La buena defensa de área de Thiago Silva y David Luiz hizo que ese ataque posicional constante de Chile no tuviera una amenaza real. Así se fue el partido a la prórroga, en la que Brasil comenzó con algo más de agresividad, pero sin proponer un plan de ataque fluido, ni siquiera cuando Willian entró al campo. Pinilla tuvo el 2-1 en la última acción del partido, pero su remate se fue al larguero y el choque se resolvió en los penaltis, con 3-2 favorable a los brasileños. En resumen, Brasil hizo un buen primer tramo de encuentro, basado en una presión adelantada sobre la salida chilena, y juego directo sobre Fred, donde apareció un fantástico Neymar. Sin embargo, fue ampliamente superado por Chile en el segundo tiempo, y logró el pase en la tanda de penaltis.

4. Reacciones de los protagonistas

Luis Filipe Scolari (Fuente: fifa.com): “Cuando recibimos la noticia del emparejamiento, sabíamos que íbamos a encontrar muchas dificultades. Es un equipo muy organizado, con un buen sistema táctico y buenos jugadores. Nuestra victoria en los penales no desmerece a Chile, sino que da valor a nuestra actuación, a nuestra pelea por la clasificación. Ahora los jugadores van a tener descanso, y durante la recuperación les mostraremos cómo hemos ganado, las situaciones más difíciles y una serie de detalles, para aprovecharlo mejor. Pero cuando uno gana de esta forma sale fortalecido, vamos a hablarlo con ellos para intentar ponerlo en valor”.

Jorge Sampaoli (Fuente: fifa.com): “No estoy contento. Lo dimos todo, jugamos contra un estadio entero, contra los anfitriones, y no conseguimos pasar. Nuestros jugadores han hecho historia, y han representado a su país de manera excelente. Tuvimos la posesión del balón, hicimos un gran esfuerzo, arriesgamos más y luchamos hasta el final. Si no fuese por ese balón contra el larguero, todo podría haber sido distinto. Pero no sucedió así. Espero que el dolor que sentimos ahora cambie en el futuro. Con el tiempo, el análisis será diferente, y podremos apreciar lo que ha hecho este equipo”.


viernes, 27 de junio de 2014

Ghana, Cristiano, y la puerta de atrás

Foto (fifa,com)

Era el grupo de la muerte, y aunque Costa Rica se encargó de dejar claro que había otros lados donde mirar, que hayan quedado fuera Cristiano Ronaldo, y la que quizá, es la selección africana de mayor nivel teniendo en cuenta el equilibrio colectivo e individual, ha demostrado que pasar a octavos en el Grupo G era realmente complicado. Alemania no especuló contra los Estados Unidos y ganó un partido en el que pasaron pocas cosas, pero que demuestra que los de Löw -por si había alguna duda- tienen en Thomas Müller un jugador de categoría mundial. Quizá su mayor recurso competitivo para encontrar la Copa del Mundo. Otra vez resolvió un partido complicado, porque lo que ha configurado Klinsmann en EEUU es un equipo sólido y bien mezclado. Una vez más, su trío de centrocampistas (Beckerman, Jones y Bradley) volvió a dejar una actuación colectiva más que competente, y ayudan a creer que el cruce frente a Bélgica de la sensación de ser uno de los más abiertos de los octavos de final. 

Porque Alemania y Estados Unidos lograron el pase en detrimento de Portugal y Ghana. El combinado luso deja una actuación general bastante decepcionante, aunque en el tramo final de partido ante los ghaneses dieron la sensación de poder obrar el milagro. Cuando Eder salió del campo, Varela, Nani y Cristiano Ronaldo comenzaron a juntarse por dentro, y los de Paulo Bento produjeron, además del 2-1, unas cuantas ocasiones que no encontraron la red de los africanos. Quien lo tuvo mucho más cerca fue Ghana, que con el 1-1 estuvo muchos minutos a un gol de lograr el pase. No terminó el equipo de Appiah de alcanzar el ritmo con pelota que vimos, a pesar de la derrota, en el partido de su debut frente a Estados Unidos, y una vez más Asamoah Gyan fue su hombre más destacado, aunque con su sola aportación no fue suficiente para encontrar el gol decisivo. Se marcha uno de los mejores jugadores del mundo y uno de los equipos más divertidos del torneo, pero los que quedan tienen argumentos de sobra para disfrutar de su pase. No podían quedar todos. 

Análisis de partidos: Rusia 1-1 Argelia

1. Contexto y datos del partido

Tercera jornada, Grupo H: Rusia 1 (Kokorin) - Argelia 1 (Slimani)

Datos del partido (Fuente: squawka)

El Grupo H se cerraba con un partido que daría el pase al vencedor, siempre y cuando Corea no le ganase a Bélgica con el margen suficiente como para recuperar la diferencia de goles. Rusia solo había obtenido 1 punto -frente a los coreanos-, pero llegaba a la última jornada sabiendo que si ganaba su partido estaría en octavos. A Argelia le servía el empate para pasar, con el matiz comentado anteriormente con respecto a Corea.

2. Planteamientos

A Rusia solo le valía la victoria y Fabio Capello modificó por primera vez en el torneo su esquema base, utilizando dos puntas. En los dos primeros partidos, el técnico italiano se había decantado por alinear en izquierda a Zhirkov y Kannunikov, pero esta vez mandó allí a Shatov, que venía jugando por dentro, para poder tener dos hombres arriba. Un 4-4-2 formado por Akinfeev en portería, con Kozlov -lateral derecho-, Kombarov -izquierdo- y Vassili Berezutski e Ignasevich como pareja de centrales configurando la defensa, un medio campo con Glushakov - Fayzulin como doble pivote, Samedov como centrocampista por derecha y Shatov en izquierda, y Kokorin, como segundo punta, y Kerzhakov, como delantero centro, completando el once.

Halilodzic, el seleccionador argelino, decidió no tocar prácticamente nada con respecto al partido frente a la República de Corea -simplemente entró Belkalem en lugar de Bouguerra-, lo que provocó que se mantuviera el 4-2-3-1, bastante atrevido, teniendo en cuenta que el empate clasificaba a los africanos. M'Bolhi fue el portero, con Mandi -derecha- y Mesbah -izquierda- como laterales, mientras que Belkalem y Halliche compusieron la pareja de centrales. En medio campo se mantuvo el doble pivote Medjani-Bentaleb, con la línea de mediapuntas por delante, de derecha a izquierda, formada por Feghouli-Brahimi-Djabou, y con el delantero del Sporting de Portugal, Slimani, ejerciendo de 9 de los africanos.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

A pesar de que a Rusia solo le servía la victoria, y de alinear a dos puntas, los de Capello no tomaron una actitud excesivamente agresiva en ningún momento. El técnico italiano parecía tener claro que el principal recurso de Argelia era poder encontrar con cierto espacio a Feghouli y Brahimi, y el combinado europeo se juntó en campo propio con dos líneas de cuatro que no dejaban progresar con comodidad a los argelinos. El planteamiento resultó efectivo teniendo en cuenta que Argelia no tenía jugadores de medio campo en adelante -salvo Medjani- con calidad defensiva como para que sus pérdidas de balón no supusieran, casi constantemente, opción de contragolpe ruso, y por si fuera poco Djabou y Feghouli quedaban bastante alejados de sus respectivos laterales, además de que Bentaleb perdía la posición con demasiada frecuencia. A partir de esto Rusia comenzó a salir con comodidad en el primer tiempo -también con marcador a favor-, gracias a la buena lectura de Kokorin para moverse entre líneas y al espacio que tuvieron Shatov y Samedov para recibir y ayudar a esas transiciones. El primer tiempo terminó con 1-0 para Rusia y la sensación de que Argelia no tenía demasiados recursos para dañar a esa defensa organizada de los de Capello, que además se desplegaban con cierta continuidad. 

En la segunda parte, sin embargo, Argelia comenzó a poder soltarse con más frecuencia. Los robos encontraron a Djabou y Feghouli más abiertos, y sus conducciones metieron a su equipo en campo rival. En medio de esas salidas estuvo Slimani. El punta del Sporting hizo un partido soberbio. En apoyos, disputas, choques, ayudó a su equipo a producir acciones ofensivas, e incluso a tomar aire una vez, él mismo, pusiera el 1-1. 


Porque a partir del 1-1 Argelia retrasó sus líneas, ante la necesidad rusa de marcar, y fue cuando los de Capello más problemas para atacar tuvieron. Ahí, Slimani ofreció alternativas profundas y opciones en juego directo, hasta que definitivamente, Halilodzic modificó el esquema, pasando a un 4-1-4-1 que ha utilizado mucho durante la fase de clasificación. Entonces, Medjani se colocó como pivote, con Yebda y Bentaleb como pareja de interiores, y Ghilas-Feghouli trabajando en las bandas. A Rusia le costó entonces encontrar soluciones. Primero, Capello metió a Dzagoev para encontrar algo de imaginación y capacidad para dar el último pase, y acabó con Kannunikov por Kerzhakov para abrir el campo y buscar algo de desborde exterior. Ninguna de las soluciones fue efectiva, y los minutos fueron cayendo sin encontrar soluciones de calidad, hasta consumarse la eliminación rusa, y la enorme alegría de los argelinos, que por primera vez alcanzan la ronda de octavos en un mundial. En resumen, Rusia se aprovechó del contexto inicial para ponerse por delante y explotar su plan de contragolpe, pero las soluciones argelinas focalizadas en Slimani llevaron al empate, momento a partir del cual los de Capello se atascaron sin encontrar vías hacia el segundo gol.

4. Reacciones de los protagonistas

Vahid Halilodzic (Fuente: fifa.com): "Me siento muy orgulloso, hemos jugado un partido heroico y nos hemos merecido la clasificación. Estamos muy, muy satisfechos. Hemos avanzado muchísimo en los últimos tres años y ésta es la recompensa. Hemos recibido el apoyo de todo el mundo árabe, lo que me parece absolutamente maravilloso. Aquí en Brasil, la gente ha agradecido nuestra sinceridad y entusiasmo, lo que me enorgullece enormemente. Pero, sobre todo, me siento orgulloso de la forma en la que ha jugado el equipo. La gente no para de hablar de 1982, cuando Argelia derrotó a Alemania, ¡pero 32 años es mucho tiempo!".

Fabio Capello (Fuente: fifa.com): "En toda mi carrera, jamás había visto un Mundial con este nivel. La calidad es absolutamente increíble y la velocidad, intensísima. Estamos viendo una competición fantástica. El más mínimo error que cometas, lo pagas. Nosotros hemos cometido pequeños fallos y hemos pagado por ellos. No me gustan las excusas, acepto la derrota. En este Mundial, he jugado para el presente, no para 2018. Habríamos podido ganar perfectamente, pero cedimos un gol. Creo que hemos jugado muy bien, y que, además, el portero argelino defendió muy bien en varias ocasiones. La selección de Argelia tiene un equipo excelente. Reúne potencia y calidad. Se merece todo el respeto del mundo, como llevo diciendo desde que empataron el partido".

jueves, 26 de junio de 2014

Xherdan sí, Enner no

Drmic y Shaqiri, la pareja del día en Suiza (Foto: AFP)

Quedó definido el grupo E, y los dos partidos, a pesar de no ser nada del otro mundo, dejaron detalles importantes. En primer lugar, que se confirma que Xherdan Shaqiri ha llegado a la cita mundialista en un momento de forma brutal, y el choque contra Honduras además le puso en el primer plano del escaparate mediático, porque hacer un hat-trick en una Copa del Mundo son palabras mayores. Lo hizo, además, tras una modificación bastante interesante de Ottmar Hitzfeld, puesto que el futbolista del Bayern abandonó su posición habitual partiendo de la derecha para jugar totalmente liberado como mediapunta. Su asociación con Drmic fue bestial. Honduras dejó espacios, y allí Shaqiri se hizo grande con recepciones en toda la horizontal de la zona de tres cuartos, pero además encontró a un amigo en el punta recientemente fichado por el Bayer Leverkusen. Drmic comenzó a romper a banda, aguantó la pelota y permitió que Shaqiri llegase para jugar de cara. Así llegaron el 2-0 y el 3-0. Lo mejor de todo, eso sí, fue el 1-0. Una obra de arte del futbolista del Bayern. Le seguiremos disfrutando, como mínimo, un partido más. Todos menos los argentinos, el rival suizo en octavos. 

A quien no veremos más será a Enner Valencia, y lo cierto es que Ecuador se marcha del mundial habiendo dejado una imagen bastante más pobre de lo que esperábamos. No fue, eso sí, frente a Francia, donde al menos el conjunto de Reinaldo Rueda se armó bien en su defensa posicional y no permitió espacios para un combinado bleu que, aunque bien es cierto que jugó con varios suplentes, estuvo menos lúcido en ataque con respecto a lo visto en las dos primeras jornadas. El rendimiento defensivo ecuatoriano fue sólido, pero no así su plan para desplegarse. Ninguno de los hombres que debía ayudar a que Enner Valencia pudiera recibir alguna pelota al espacio, o incluso algún centro lateral en condiciones, estuvo acertado. Jefferson Montero, Antonio Valencia y Michael Arroyo estuvieron imprecisos. Enner buscó profundidad, cayó a bandas y ofreció recursos distintos de todo tipo y muy positivos. Sin duda, lo más rescatable de una selección ecuatoriana que abandona la cita por la puerta de atrás, bastante lejos de lo mostrado en el camino hasta Brasil, e incluso con una imagen extraña en el final de partido, donde la entrada de Caicedo -minuto 89- o alguna pérdida de su buen portero Domínguez en el descuento, ayudó a esa idea final de que los ecuatorianos pudieron dar bastante más. 

Análisis de partidos: Argentina 3-2 Nigeria

1. Contexto y datos del partido

Tercera jornada, Grupo F. Argenina 3 (Messi x2, Rojo) - Nigeria 2 (Musa x2)

Datos del partido (Fuente: squawka)

Argentina llegaba a la última jornada de la fase de grupos habiendo sumado 6 puntos, y le servía el empate frente a Nigeria para ser primera de grupo. Los nigerianos, por su parte, llegaban con 4 puntos, y de ganar a Argentina hubiesen alcanzado el primer puesto, el empate les clasificaba, y en la derrota dependían de que Irán no mejorase su goal averge en caso de que los asiáticos hubiesen ganado a Bosnia para mantener el segundo puesto.

2. Planteamientos

Después de la desilusionante prueba en el partido de debut de la selección argentina frente a Bosnia, en el que Alejandro Sabella probó con un 5-3-2, la albiceleste se ha asentado en el 4-3-3 con el que había rendido bien en las eliminatorias sudamericanas. El once, que ya empezamos a conocer de memoria, fue el compuesto por Romero en portería, Zabaleta lateral derecho, Rojo lateral izquierdo, y pareja de centrales para Federico Fernández y Ezequiel Garay. Por delante, Mascherano actuó como mediocentro, con Gago como interior derecho y Di María interior izquierdo. Messi enganchaba el centro del campo y la delantera, que fue compuesta por Sergio Agüero y Gonzalo Higuaín. 

Stephen Keshi, el seleccionador nigeriano, no hizo ninguna adaptación especial por el hecho de enfrentarse a Leo Messi, y repitió la alineación que venció a Bosnia en la segunda jornada. Nigeria formó en el 4-2-3-1 habitual, con Enyeama en portería, defensa compuesta por Ambrose -derecha- y Oshaniwa -izquierda- como laterales, siendo Yobo y Omeruo la pareja de centrales. En medio campo, el doble pivote inamovible: Onazi y Obi Mikel, con Babatunde, que entró en la segunda jornada, actuando como mediapunta. Las bandas en medio campo fueron por Odemwingie, que se ubicó en la derecha, mientras que el perfil izquierdo fue para Ahmed Musa. La punta del ataque la ocupó Emenike.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El partido empezó de forma frenética, con 2 goles en los primeros cinco minutos. El planteamiento nigeriano daba cierto espacio para las recepciones de Leo Messi, ya que el doble pivote de los africanos (Mikel - Onazi) tenían un comportamiento bastante agresivo, y quedaban alejados de su pareja de centrales. No solo produjo el futbolista del Barcelona, ya que sus recepciones atraían a ambos centrocampistas y quedaba un espacio bastante amplio para que apareciera Di María, que quizá fue el hombre más destacado, en términos de continuidad, del primer tiempo.

Mapa de calor de Di María (fuente: squawka)
La actividad del fideo fue brutal, que, aunque hay que matizar que se aprovecho de un planteamiento nigeriano que le concedía ventajas, resultó una enorme noticia para el conjunto de Sabella. Desbordó con sus conducciones, se abrió para meter algún centro, encontró posición de disparo con frecuencia, y, en líneas generales, fue un argumento ofensivo de gran calidad porque, además, cuando en el segundo tiempo vimos a una Nigeria más instalada en campo argentino, ofreció varios despliegues que ayudaron a la albiceleste a transitar hacia posiciones de ataque. La actitud agresiva de Nigeria, no obstante, puso ciertos apuros, porque aunque concedía en campo propio, ofrecía la posibilidad de contragolpear con varios jugadores muy determinantes en este arte. Así, un Musa bastante adelantado amenazó la espalda de Zabaleta, y por supuesto, con los movimientos de un Emenike que es quizá el jugador más destacado de los africanos en lo que llevamos de mundial. Ese fue el gran argumento ofensivo de Nigeria, que sin embargo tuvo que hincar hasta dos veces la rodilla por culpa de la zurda de Leo Messi, que quizá, aunque no estaba siendo tan decisivo como el escenario de partido le podía llegar a permitir, hizo otra vez los goles de su equipo.

Antes de llegar al descanso se produjo la lesión de Agüero, que merece una lectura especial porque la entrada de Lavezzi le dio bastante a la selección argentina. El del PSG -que ha jugado mucho en banda esta temporada-, comenzó a trazar movimientos más largos y laterales delante de la línea de pelota, dándole espacio a Messi y alternativas a Gago, y fue un elemento más de profundidad, desde el otro sector, que añadir a la aportación de Di María. Lavezzi es, desde luego, menos resolutivo que Agüero, pero tácticamente ofrece soluciones de calidad, e incluso podría llegar a sumar en términos defensivos, donde Argentina sufrió en el segundo tiempo. Con Nigeria metida en campo rival, la defensa posicional argentina fue floja. El problema es que este 4-3-3 no tiene extremos con retorno, si no tres delanteros, y a Mascherano-Gago-Di María les queda una enorme parcela de terreno que abarcar. Por si fuera poco, solo Mascherano, de ese trío de centrocampistas, es capaz de guardar la posición, por lo que a sus lados y en el frente de los laterales hay demasiadas ocasiones en las que el rival tiene opción de recibir. Garay y Fede Fernández pueden resolver situaciones gracias a su calidad para defender el área, pero no sería descartable que a partir de octavos veamos un Lavezzi más sacrificado en tareas defensivas, para sumar, en algunas fases, a un hombre más al medio campo. Finalmente Nigeria no anuló el gol de Rojo -uno de los argentinos más destacados del mundial- y la albiceleste acabó primera de grupo. En resumen, Nigeria concedió demasiado, pero es indiscutible que Argentina ofreció algo más en su ataque posicional con respecto a lo visto frente a Irán y Bosnia. Messi lleva cuatro goles y Di María parece haberse subido al carro, además de Lavezzi, que mostró que tiene mucho que aportar. 

4. Reacciones de los protagonistas

Alejandro Sabella (Fuente: Ole): "Creo que hicimos un buen partido, más allá de los dos goles. Creamos muchas jugadas. Esperamos seguir mejorando. Se originaron problemas atrás porque tenemos un equipo muy ofensivo y Nigeria se desdobla rápido. Juegan desinhibidos y puede pasar".
"La clasificacián ya la teníamos, pero ahora había que terminar primeros y era lo que apuntábamos. El equipo mejoró. Más movilidad. Más circulación y velocidad. Más cambio de ritmo y velocidad. Tuvimos muchas jugadas para marcar más goles, Partidos diferente. En este último, un partido distinto. La idioscincracia de Nigeria, si bien esperó, es más versátil. Espera y si necesita te pone cuadro delanteros. No son tan agresivos a la hora de ocupar espacios y marcar. Se dio un partido de ida y vuelta, como por momentos se dio. En líneas generales, el equipo mejoró. Tuvo bastante control de la pelota. Y además del contro, pudo dañar al rival. Muchas opciones y movimientos de los jugadores, de los volantes, para llegar al gol".
"Tener más espacios con los jugadores nuestros. Con cualquier equipo que da más espacios, tenás más chances para convertir. Tenés que ser efectivo ante un equipo que tiene potencial ofensivo. Nos hicieron dos goles. Tuvieron chances. Son jugadores que con espacios no te perdonan".
"Ellos cambiaron el módulo. Pusieron gente grande y empezaron a mandar centros. Fundamentalmente, habia que estar atentos a la segunda jugada. A las contras.  Salir y llevar la pelota a un costado para desgastar al rival".

Stephen Keshi (Fuente: fifa.com): "Es un honor y estamos muy contentos por seguir adelante. Pienso que perdimos el partido porque en la primera parte jugamos con demasiado respeto por Argentina. En la segunda, logramos hacer nuestro juego, fuimos más ofensivos, tuvimos más posesión y jugamos mejor. Pero Argentina es un gran equipo. Y Messi es un gran jugador, está bendecido, y no puedes escapar de él. Messi es de Júpiter".

miércoles, 25 de junio de 2014

El grito de Samaras

Samaras (Foto: AFP)

Quizá a otro les hubiese importado perder dos hombres cuando aún no se habían cumplido 25 minutos de juego, pero a ellos no. Se cumplían 10 años de una de las mayores sorpresas en la historia de la Eurocopa, y los griegos hicieron honor a aquel equipo. Con Karagounis de capitán, por si acaso. A Grecia solo le servía ganar y Fernando Santos modificó por primera vez su planteamiento en lo que llevamos de mundial. Invirtió el triángulo que su trío de centrocampistas suele formar en medio campo para acercar a uno de ellos -Panagiotis Kone- al delantero centro, que en el partido de ayer, con Mitroglou lesionado, fue Giorgios Samaras. No solo la necesidad de victoria, también el rival, Costa de Marfil, invitaba a ello. El combinado africano junta a algunas individualidades de grandísimo nivel -Yaya Toure, Drogba, e incluso Gervinho, que ha sido el mejor elefante en la Copa del Mundo tras llegar de un fantástico año en Roma-, pero vuelve a carecer de un plan colectivo estable. La primera de esas carencias está en su funcionamiento en la salida de pelota. Lento y previsible, Grecia se lanzó a por ellos a más altura de lo esperado. 

Santos perdió a Kone, pero dio entrada a Samaris, más agresivo incluso que el del Bologna a la hora de apretar a los rivales, y en una de esas Grecia pescó premio. Los costamarfileños salieron desde atrás sin ofrecer alternativas al poseedor y con demasiado sosiego, y Samaris robó una pelota clave, que le devolvió Samaras y que acabó en la red de Barry. Con marcador en contra, Lamouchi dio entrada en el segundo tiempo a Bony, retirando a Tiote, pero aquello significó una sangría, porque Grecia tenía más campo para salir. No acertaron los europeos a batir el arco rival, y en un desajuste defensivo Gervinho asistió a Bony. Costa de Marfil tenía un hombre menos en medio campo, pero uno más para cargar el área. Y fue entonces, cuando todo parecía perdido, el momento de Samaras. Lo cierto es que Samaras cuajó un partido brillante, siempre bien orientado para ayudar a su equipo a desplegarse, peleando cada balón y mostrando un notable acierto con pelota, pero su estrella terminó de encenderse en la jugada final. Forzó el penalti, se mostró al mundo con un gesto tan temoroso que, probablemente, la opinión general fue: "lo falla". Pero no, era el líder griego. El líder de un equipo que hacía diez años había obrado el milagro de ganar una Eurocopa, a Portugal, en su propia casa. El penalti fue a un lado, interior del pie, con seguridad. Copa Barry no llego, y Grecia está en octavos. Épico.

Análisis de partidos: Italia 0-1 Uruguay

1. Contexto y datos del partido

Tercer partido, Grupo D. Italia 0 - Uruguay 1 (Godín)

Datos del partido (fuente: squawka)

Italia llegaba al partido decisivo con 3 puntos, y superando a Uruguay en el goal average, por lo que a los Prandelli les servía el empate para acceder a octavos. Uruguay, tras perder el partido inaugural ante Costa Rica, llegaba tras vencer a Inglaterra, y tenían que sumar los tres puntos para pasar de ronda.

2. Planteamientos

Cesare Prandelli modificó su once drásticamente,si tomamos como referencia lo que habíamos visto en los dos primeros partidos. El técnico lombardo pasó al 5-3-2, con la base de la Juventus. Es decir, Buffon ocupó la portería, mientras que la línea de tres centrales la compusieron, de derecha a izquierda, Barzagli, Bonucci y Chiellini. Los carriles exteriores fueron para Darmian -derecha- y De Sciglio -izquierda-. El cambio de sistema hizo que Pirlo regresase a su posición habitual como mediocentro, mientras que la pareja de interiores fueron Verratti a la derecha y Marchisio a la izquierda. El once lo completaron Balotelli e Immobile como pareja de puntas.

Óscar Washington Tabárez, por su parte, también modificó su esquema, quizá para adaptarse a la propuesta italiana, ya que los nombres fueron los mismos que jugaron contra Inglaterra. Uruguay jugó con un 5-4-1, con Muslera en portería, línea de tres centrales, con Giménez a la derecha, Godín en el centro y Martín Cáceres a la izquierda. Las bandas fueron para Álvaro González -derecha- y Álvaro Pereira -izquierda-. En medio campo, Arévalo Ríos fue quien hizo la función de mediocentro, mientras que Lodeiro y Christian Rodríguez le acompañaron como pareja de interiores. A Edinson Cavani, dada la tarea que le encomendó Tabárez, podemos considerarle un centrocampista en el sistema, siendo Luis Suárez el único punta del combinado charrúa.  

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

A pesar de que a la selección uruguaya solo le servía la victoria, el planteamiento de Tabárez se adaptó a la selección italiana, siendo bastante precavido en su altura y con algunas marcas que, a pesar de no ser individuales, fueron bastante específicas. A Italia le servía el empate, por lo que tampoco arriesgó demasiado a la hora de mandar gente por delante de la línea de balón, y el primer tiempo no tuvo demasiado ritmo ni espacios. 

La vigilancia de Cavani sobre Pirlo fue constante, e Italia perdió conexión en muchos momentos con su pieza clave a la hora de iniciar jugada. Verratti dejó algunas acciones de gran impacto visual con pelota, pero su peso en el juego fue bastante intermitente. El cambio de sistema italiano no fue positivo, y el argumento de adaptar el funcionamiento Juventus a la selección tiene matices importantes. Es cierto que la defensa + Pirlo es la del campeón italiano, pero a la Nazionale le faltan las piezas más importantes para que el sistema funcione: Italia no tiene a Lichtsteiner, Vidal y Asamoah, los que aportan profundidad en la Vecchia Signora. Así, Italia jamás consiguió, a pesar de llevar la iniciativa, incomodar a Uruguay. El único que hizo algún movimiento favorable por delante de la línea de pelota fue Balotelli, pero estuvo bastante desacertado cuando recibió, mientras que Immobile fue ampliamente superado por el hombre del partido: Diego Godín. De hecho, en el primer tiempo, las acciones de mayor peligro fueron uruguayas, cuando Cristian Rodríguez, Álvaro Pereira y Luis Suárez se juntaban sobre el sector derecho azzurro, donde Verratti, en términos defensivos, estuvo bastante concesivo. 

El regreso de vestuarios fue similar, aunque se produjeron dos episodios que cambiaron el partido. En primer lugar, la expulsión de Marchisio, y en segundo, el cambio de Cassano por Immobile. Con la inferioridad numérica la selección italiana dio un paso atrás, pero cuando perdió la producción en los espacios de Immobile, perdió también su capacidad de salir. Cassano estaba completamente aislado, y se hacía imposible que se impusiese en el duelo físico ante Giménez y Godín por simple gesto técnico. El choque, a partir de entonces, se convirtió en un ataque posicional constante del combinado uruguayo que, todo hay que decirlo, no llegó nunca a ofrecer soluciones sólidas. Con los italianos bien agrupados atrás, prácticamente en ningún momento salieron soluciones interiores -le mejor ocasión, de Luis Suárez, fue fruto de un rebote-, e incluso los centros laterales llegaban desde posiciones muy retrasadas. El mayor rédito que estaba sacando Uruguay era obtener balones parados, en forma de faltas o córners. Finalmente, así encontró el combinado charrúa el 0-1, gracias a otro gol decisivo de Godín, que a la postre significaría el pase. En resumen, Uruguay no arriesgó a pesar de necesitar la victoria, e incluso pasó problemas cuando tuvo que abrir espacios en la defensa italiana, aunque finalmente, la constancia en los ataques y un balón parado acabó abriendo la puerta del gol clave. 

4. Reacciones de los protagonistas

Óscar Washington Tabárez (Fuente: fifa.com): “Tratamos de jugar de la mejor manera posible ante el que prometía ser nuestro rival más difícil, y lo ha sido. Cambiamos nuestra forma de jugar por el tipo de adversario que teníamos delante: una generación italiana que destaca por su mediocampo y que ha jugado con dos delanteros, al contrario que en los dos primeros partidos. Después, nos adaptamos a la situación provocada por la expulsión de Marchisio, cuando buscamos ocupar más el campo italiano. Por suerte, funcionó”.

Cesare Prandelli (Fuente: fifa.com): “Estoy contento por haber jugado bien, aunque sin duda no es un trofeo que hubiera querido recibir así, ahora. En el plano personal, pensando en nuestro equipo y también en todo nuestro país, es un día duro. Es un día de fracaso. Estamos tristes por la forma en que hemos jugado. Es algo que debe hacernos reflexionar. Ahora es el momento de que hagamos examen de conciencia”.