lunes, 29 de septiembre de 2014

Guardiola y el despertar de Götze



El fichaje de Mario Götze por el Bayern München hizo tambalear los cimientos del Signal Iduna Park. Su llegada, además, se anunció en un momento clave de la temporada, justo un día antes de que el Borussia Dortmund recibiese al Real Madrid en las semifinales de la Liga de Campeones 2012/2013. La grada no se cebó con su estrella, pero el ambiente estaba enrarecido; una de las piezas clave en los éxitos del equipo se marchaba al máximo rival del momento. Poco después el Bayern le ganaría al propio Dortmund la final de aquella Liga de Campeones, y pasado el verano Götze se pondría bajo las órdenes del recién llegado Pep Guardiola. Su primera en las filas del Bayern, la 2013/2014, tuvo más sombras que luces. Tuvo protagonismo en la consecución del título, aunque no terminó de lucir con continuidad, o al menos no tanto como se presuponía tras su fichaje, y la rotunda eliminación del equipo en semifinales de la Liga de Campeones a manos del Real Madrid tampoco ayudó a colorear su temporada. 

El gol en la final del mundial le puso en todas las portadas de la prensa alemana, pero lo cierto es que ni en Brasil -donde fue suplente- ni en el arranque con el Bayern, Götze estaba terminando de mostrar su mejor cara, o al menos la que se le presuponía a una de las grandes estrellas emergentes del fútbol alemán, y a un fichaje que supuso un gasto importante para el club bávaro. En este arranque de temporada hemos visto a Götze en diferentes papeles, desde escorado a la izquierda en la última línea (Wofsburg o Schalke 04), como enganche más puro (frente a Stuttgart), o incluso metros más atrás, como interior izquierdo (frente al Manchester City en Liga de Campeones). Sin embargo, la mejor versión de Mario Götze ha llegado en los dos últimos partidos (frente a Paderborn y Köln), y en ambos choques hemos visto algunos matices colectivos que están ayudando a que el ex futbolista del Dortmund tenga más protagonismo. 

Guardiola está poniendo en práctica un sistema en el que el medio campo lo ocupan Xabi Alonso como pivote y Lahm como interior derecho, quedando despejado el carril interior izquierdo. 



Esa zona la están ocupando Alaba (frente al Paderborn fue lateral y frente al Köln central zurdo), Müller, que en ocasiones retrocede su posición para ofrecer opciones entre líneas, y sobre todo Götze, que tiene libertad para participar en la creación, pero también para llegar a zona de remate, o incluso escorarse para recibir en posición de extremo izquierdo, y allí aprovechar su regate. Hay que matizar que el lado de desborde es el derecho. El hombre clave es Robben, y Pep lo está clavando en banda diestra para que desde allí desequilibre. Además, le acerca a Lahm, que con Alonso está ofreciendo movimientos más verticales, bien en conducción o bien sin pelota. Lahm tiene una tremenda habilidad para doblar, tanto por dentro (muy útil si Robben está pegado a la banda), como por fuera (en caso de que el holandés esté más centrado). Eso provoca que el desequilibrio llegue en ese perfil gracias a uno u otro, por lo que tener a Müller y Götze volcados en la izquierda asegura poder atacar el lado débil del rival para rematar (ver gol de Götze contra el Köln) con dos hombres de tremendo acierto en la definición. Götze tiene gol, y este sistema le permite acercarse a él.

Pero eso ya lo sabíamos (sin lucir demasiado, alcanzó los 14 tantos la temporada pasada), y el reto para Guardiola era conseguir que tuviera peso en los circuitos de pase del equipo. Su capacidad técnica en recepción, orientación y conducción le hacen un valor tremendo para desordenar sistemas rivales. En otras palabras, Götze es, a nivel técnico, un futbolista que, potencialmente, puede ofrecer soluciones similares a las que llegó a alcanzar Andrés Iniesta en su Barcelona. Quizá en ese momento está la formación de Guardiola con él: intentar acercarle a los primeros pases sin alejarle de lo que su talento natural le permite hacer en el área y cerca de ella.


Con esa zona libre, Götze puede ir a ofrecer soluciones sin nadie que impida sus recepciones. Alonso, si debe cambiar el juego de banda (captura derecha), tendrá que servir a Götze si quiere arriesgar, o al lateral, si quiere hacer un pase más seguro. Es este el registro que el ex futbolista del Dortmund ha añadido a su juego en los dos últimos partidos. Es decir, ha mantenido apariciones en el área para rematar, o toques abierto sobre la izquierda para, desde allí, tratar de desbordar, pero ahora está dando muchos más pases y ofreciendo algún regate en zonas retrasadas, algo que sin duda le hará crecer como jugador, pero que además le dará mucho al equipo, porque el rival se comenzará a desordenar desde el comienzo de las acciones ofensivas. 


En estas capturas (pases), a pesar de que la diferencia de calidad entre uno y otro rival era grande, se observa bien la influencia de Götze. Y, aunque es cierto que el Schalke 04 es rival fuerte, también lo es que el Bayern dejó la que había sido mejor media hora del equipo hasta los dos últimos encuentros. En ese partido contra el Schalke Götze jugó de extremo izquierdo en un 4-2-3-1, mientras que frente al Paderborn, hizo ese particular rol de interior izquierdo expuesto hasta ahora. La diferencia fue tremenda, con mucha más presencia en campo propio, y manteniendo la libertad ofensiva vista hasta el momento. Veremos qué sucede cuando Ribery comience a entrar con regularidad en los onces -esta idea parece bastante incompatible si el francés está en el campo-, pero hasta el momento Guardiola parece estar recuperando para la causa a un jugador con un talento inmenso, que no estaba terminando de mostrarse. Será uno de los alicientes de la temporada ver hasta dónde llega. 

Lunes de resaca

Bielsa maquina y el Marsella disfruta. Son líderes en solitario de la Ligue 1. 

1. Inglaterra


Fin de semana de grandes clásicos en la Premier League. La jornada se abrió con un Liverpool - Everton, que acabó en empate a uno. El derby del Merseyside fue dominado por el Liverpool, que consiguió producir más ocasiones a partir de la entrada de Coutinho. El Everton vivió todo el partido bastante replegado, y logró llevarse un punto después de un impresionante disparo de Phil Jagileka con el tiempo casi cumplido. 

Otra de las grandes rivalidades de Inglaterra tuvo lugar este fin de semana en el Emirates Stadium. Arsenal y Tottenham también empataron a uno en el North London Derby, y el guión fue relativamente parecido: los gunners consiguieron algunos tramos de buen ritmo con pelota, recuperaciones rápidas y sufrieron pocos contragolpes. Les faltó a los de Wenger algo más de producción ofensiva, y no conceder el 0-1 después de un fallo en la salida de balón.

El Chelsea, que se mantiene líder en solitario, ganó sin problemas al Aston Villa (3-0). Los de Jose Mourinho dejaron un arranque de partido con muchísimo ritmo; Fabregas encontrando a la línea de mediapuntas -Willian, Oscar y Hazard- y con la habitual influencia de Diego Costa. El hispanobrasileño se volvió a convertir en el protagonista del choque, con su gol -su 8º tras 6 jornadas- y con la jugada del tanto de Willian. 

Logró salvar la papeleta el Manchester City en su visita a Hull. Dos errores de Mangala -que venía de dejar una auténtica exhibición frente al Chelsea- dinamitaron la ventaja de dos goles que los de Pellegrini lograron en los primeros minutos de encuentro. Sin embargo, en el segundo tiempo apareció la calidad de Silva, que sirvió un gran balón a Dzeko para desequilibrar la balanza. Lampard, que entró en el tramo final, volvió a ver puerta para poner el 2-4 definitivo. 

Segunda victoria del Manchester United de Louis van Gaal, tras ganar, con mucho sufrimiento, 2-1 al West Ham en Old Trafford. El técnico holandés repitió el 4-4-2 en rombo (con Di María y Herrera como interiores) que vimos frente al Leicester. Atrás hubo algunas bajas, pero de medio campo en adelante repitió, con Mata en el banquillo. El United dejó un arranque productivo ofensivamente hablando, y la buena noticia es que supo sufrir en el tramo final tras la expulsión de Rooney.



2. Italia

En la Serie A, pulso desde el minuto uno entre Juventus y Roma, que suman 15 puntos tras 5 jornadas. La Vecchia Signora ganó con solvencia en su visita a Bérgamo (0-3 frente a Atalanta), aunque los de Colantuono compitieron bien durante el primer tiempo. Tévez fue el gran protagonista; marcó dos goles y suma ya 6 -4 en liga- en lo que llevamos de temporada. La Roma, por su parte, resolvió en el tramo final su partido contra el Hellas Verona. En el cumpleaños de Totti, el regalo se lo hizo Florenzi, que marcó el primer gol al poco de salir y se fue a abrazar al capitano. Al final, los de Rudi Garcia vencieron 2-0, y también suman pleno de victorias. 

La gran bomba de la jornada se produjo en el Giuseppe Meazza, donde el Inter cayó con estrépito (1-4) frente al Cagliari de Zeman. Los sardos no habían ganado aún, y, como suele ocurrir con el técnico checo en el banquillo, la primera victoria llegó rodeada de luces. Sorprendente hat trick de Ekdal, y triunfo cimentado en un bloque ofensivo, apretar arriba y seguir atacando aún estando en ventaja. 

El Milan no pasó del empate en su visita a Cesena (1-1), en el día que Inzaghi varió su 4-3-3. Lo hizo quitando a un centrocampista (Muntari), y poniendo a un hombre más de ataque. El 4-2-3-1 dejó buenas sensaciones, con un Menez muy acertado en su papel de hombre libre detrás de Torres, aunque al equipo le faltó algo de acierto para llevarse la victoria. 

Rafa Benítez respira después de su semana más difícil como técnico del Napoli. Los partenopeos se llevaron los tres puntos en su visita al Sassuolo (0-1), aunque en el tramo final, con Pavoletti y Zaza en el área de Rafael, los de Di Francesco estuvieron cerca de lograr el empate. Los otros equipos europeos se enfrentaron entre ellos, y Torino y Fiorentina empataron a uno. El choque dejó una grandísima actuación de Quagliarella, y la respuesta, ante las bajas de Cuadrado, Gomez y Rossi, de Bernardeschi -asistencia- y Babacar -gol-, dos productos de la cantera viola. 

La jornada se cerró con el pasional derby de Génova. Un choque entre Genoa y Sampdoria que acabó en victoria (0-1) para los blucerchiati gracias a un gol de Giabbiadini tras una falta lateral. El partido fue durísimo, con mucha fricción, y se acabó resolviendo a balón parado. Los tres puntos dejan al conjunto de Mihajlovic en un sorprendente tercer puesto. 



3. Alemania

El gran partido del fin de semana en la Bundesliga era el derby de la cuenca del Ruhr, pero decepcionó profundamente. El Schalke 04 acabó ganándole 2-1 a un Borussia Dortmund, que suma ya tres jornadas sin ganar, y que se pierde en la mitad baja de la tabla. Los hombres de más calidad -Draxler y Reus, principalmente- estaban lesionados, y eso restó nivel a un partido que tuvo mucho balón largo y escasa continuidad. Al final, dos graves fallos defensivos del Dortmund acabaron significando los tres puntos para los de Jens Keller, que encadenan por primera vez dos victorias en lo que va de temporada. 

El Bayern München de Pep Guardiola ya es líder, después de su solvente victoria (0-2) en campo del Köln. El de Sampedor repitió con la idea que vimos entre semana frente al Paderborn, con Xabi Alonso como pivote, Lahm interior derecho, y una zona liberada en el carril interior izquierdo, donde aparecían Alaba, Müller, y principalmente Götze, que en las dos últimas jornadas ha mostrado su mejor rendimiento en comparación a los últimos meses. 

Por debajo, destaca el segundo puesto del Borussia Mönchengladbach, en el que tan buen trabajo está haciendo Lucien Favre. Este fin de semana ganaron 1-2 en campo del Paderborn. Y se está deshinchando la burbuja de Roger Schmidt en el Bayer Leverkusen. Los de la aspirina llevan un punto en sus dos últimas salidas, y este fin de semana no pudieron pasar del empate (0-0) en campo del Freiburg. Aún así, mantienen la tercera plaza.



4. Francia

Seis victorias consecutivas del Olympique de Marseille de Marcelo Bielsa, que le sirven para liderar en solitario la tabla de la Ligue 1. La última llegó frente a un siempre combativo Saint-Etienne (2-1). Los pupilos del loco dejaron una primera parte soberbia, en la línea que viene siendo habitual, con mucho ritmo, robos en campo contrario, y variantes y recursos ofensivos de todo tipo. Destacaron Imbula (tercer tanto del box to box marsellés en lo que va de curso) y Payet, que vive un dulcísimo momento de forma.

El PSG, gran rival a batir en este curso, está a cinco puntos del OM. Los de Laurent Blanc siguen sin ganar a domicilio, y cuentan todos sus partidos fuera del Parque de los Príncipes por empates. Esta vez, 1-1 frente al Toulouse. El actual campeón cambió su 4-3-3 habitual, y utilizó dos puntas (Cavani y Bahebek) con Pastore por detrás. El equipo no consiguió ser fluido ante un Toulouse bien armado en medio campo, y que contaba con un buen Ben Yedder para lanzar contragolpes. 



5. Otras ligas

Fuera de las grandes ligas, a destacar el gran partido que se vivió el viernes en Portugal, donde Sporting y Porto empataron a uno. Los lisboetas jugaron una primera parte soberbia, con un gran rendimiento de Nani -que volvió loco al medio campo rival con constantes apariciones entre líneas- y Carrillo, el hombre más profundo del equipo desde los costados. Los cambios de Lopetegui surtieron efecto, y Tello fue protagonista, tanto en lo positivo, creando la ventaja del 1-1 (Sarr en propia puerta), como en la negativo, cuando definió mal una jugada en el tiempo de descuento. 

sábado, 27 de septiembre de 2014

Análisis de partidos: Arsenal 1-1 Tottenham

1. Contexto y datos del partido


Jornada 6 de la Premier League: Arsenal 1 (Oxlade-Chamberlain) - Tottenham 1 (Chadli)


Datos del partido (Fuente: Squawka)

El Arsenal llegaba al north London derby tras un principio de temporada plagado de altibajos. Las buenas sensaciones que dejó el equipo en su visita a Villa Park (0-3) quedaron ensombrecidas tras la eliminación de la Capital One Cup entre semana, en el Emirates, a manos del Southampton. Cierto es que Wenger rotó bastante para ese partido, y de ahí que no se transmitiera una sensación de preocupación excesiva. El Tottenham de Pochettino ha ido de más a menos. Tras un buen arranque con victorias frente a West Ham y QPR, los Spurs no han vuelto a ganar en liga, siendo el último partido disputado en la competición una derrota casera frente al WBA. Por contra, los suplentes sí lograron pasar en la copa de la liga, tras vencer 3-1 contra el Nottingham Forest. 

2. Planteamientos


El Arsenal repitió el particular 4-3-3 que vimos frente al Aston Villa, en el que Özil partía de la banda izquierda pero tenía total libertad para jugar en zonas interiores. Arsène Wenger salió con Szczesny en portería, defensa formada por Chambers como lateral derecho, Gibbs como lateral izquierdo, y la pareja de centrales habitual, compuesta por Mertesacker y Koscielny. En medio campo, Arteta mantuvo su rol como pivote, con Ramsey como interior derecho, más cerca del español, y Wilshere como interior izquierdo, en una posición más abierta. Oxlade-Chamberlain actuó como extremo derecho más fijo, con Mesut Özil en esa posición de falso extremo izquierdo, y con Danny Welbeck cumpliendo la función de 9. 

Mauricio Pochettino, por su parte, mantuvo el 4-2-3-1 que está siendo habitual en los Spurs en este arranque de temporada. El Tottenham salió con Lloris en portería, Naughton -Kyle Walker sigue siendo baja- como lateral derecho, Rose como lateral izquierdo, y pareja de centrales formada por Kaboul y Vertonghen. En medio campo, la sorpresa fue la inclusión de Mason en el doble pivote, al lado de Capoue, con Lamela -derecha- y Eriksen -izquierda- partiendo de los costados, quedando Chadli en la posición de segundo punta, por detrás de Adebayor, que, como viene siendo habitual, fue el 9 del equipo.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Arsène Wenger está desarrollando un sistema en el que la idea es mantener los tres hombres de medio campo -Arteta, Ramsey y Wilshere-, pero sin atar a Mesut Özil a la banda izquierda. Queda claro que el alemán tiene mucha más influencia jugando como '10', y además se le ve más motivado, participativo y disfrutando del fútbol. Para conseguirlo, Wenger está tratando de equilibrar a través de Wilshere-Gibbs (contra el Aston Villa fue Cazorla) más los movimientos de Welbeck. 



Los movimientos interiores de Özil son compensados, en ataque, con mucha altura de Gibbs, caídas a banda de Welbeck, o recepciones abiertas de Wilshere. En defensa es este último quien tiene más obligación de equilibrar el sistema, porque Özil queda alejado de la banda para realizar la ayuda a la que estaría obligado en caso de ser un extremo al uso. Durante aproximadamente la primera media hora de juego el plan resultó efectivo desde varios puntos de vista: buen ritmo en los pases en campo contrario, un Özil protagonista en esa circulación, y robos casi inmediatos después de cada pérdida. La principal nota negativa fue que el equipo no terminó de encontrar profundidad en sus ataques, más allá de puntuales incorporaciones de Gibbs, algún toque de Welbeck o alguna conducción de Oxlade, los ataques morían antes de tener oportunidad de finalizar. El Tottenham, por otra parte, no conseguía salir con demasiada continuidad, aunque la lesión de Arteta -entró por él Flamini- desestabilizó ligeramente la estructura gunner, y Chadli, Lamela y Eriksen sí lograron alguna conducción más intimidatoria en el tramo final de ese primer tiempo.

En el inicio de la segunda parte volvimos a ver a un Arsenal con bastante ritmo, aunque con el mismo problema a la hora de encontrar posiciones francas para rematar. En esa dinámica se movía el partido, hasta que un fallo de los locales en la salida de balón fue penalizado por su rival, que en tres toques logró dejar mano a mano a Chadli, quien puso el 0-1. Fue entonces cuando Wenger modificó el esquema, pasó a un 4-2-3-1 más puro, con Özil claramente detrás de Welbeck y Oxlade -derecha- y Alexis -izquierda- abriendo el campo, clavados en línea de banda. El equipo logró ser aún más profundo de lo que estaba siendo por los costados, pero los dos mejores hombres de los Spurs en el partido, Kaboul y Vertonghen, estuvieron a un altísimo nivel defendiendo el área. 


Despejes de Kaboul y Vertonghen en el partido (21) (Fuente: Squawka)

Al final el Arsenal acabó encontrando un centro que pegó en varios rivales, y que acabó en posición franca para uno de sus futbolistas más productivos en el partido, Oxlade-Chamberlain, que acabó poniendo el 1-1 final. En resumen, vimos a un Arsenal con tramos bastante positivos en circulación de balón, organización tras pérdida y ritmo, tanto con posesión como sin ella, aunque no terminó de producir ocasiones. El Tottenham aprovechó lo poco que produjo en campo rival, y se aprovechó de un gran trabajo de su pareja de centrales para acabar sacando un valioso punto del Emirates Stadium.

4. Reacciones de los protagonistas

Arsène Wenger (Fuente: Web oficial del club): "Creo que si nos fijamos en la cantidad de veces que hemos tirado a puerta, y en el tiempo que hemos tenido la pelota, puede decirse que ellos han sacado un buen resultado. Es el típico partido que ganas si no concedes un gol al equipo visitante. Ellos nos esperaron para tratar de hacernos daño al contraataque (tuvimos alrededor de un 70% de posesión), había que ser pacientes y no cometer ningún error. Además tuvimos la desventaja de perder a dos jugadores por lesión, y eso solo nos dejó el margen de hacer un cambio en el tramo final". 
"Es cierto que en el gol en contra perdimos el balón en nuestro campo, pero debo dar todo el crédito al equipo porque trabajamos todos juntos. Ellos defendieron muy bien. Kaboul, Vertonghen y Lloris estuvieron muy bien". 
"La suplencia de Alexis Sánchez se debió a una cuestión puramente técnica". 

Mauricio Pochettino (Fuente: Web oficial del club): "Los jugadores desarrollaron bien el planteamiento que preparamos. Fueron un equipo compacto y agresivo, y demostraron personalidad para ir hacia delante. La actitud y la energía que demostramos fue la correcta desde el primer minuto de partido. Cada jugador lo hizo bien, todos ellos". 

Análisis de partidos: Liverpool 1-1 Everton

1. Contexto y datos del partido


Jornada 6 de la Premier League: Liverpool 1 (Gerrard) - Everton 1 (Jagielka)


Datos del partido (Fuente: squawka)


El Liverpool afrontaba el derby en un momento de muchas dudas. Seis fueron los partidos que el equipo dirigido por Brendan Rodgers perdió en Premier League en todo el curso pasado, y en este, cuando apenas llevábamos cinco jornadas, ya habían caído tres veces. La última derrota liguera se produjo en campo del West Ham (3-1), mientras que entre semana los reds pasaron de ronda en la Capital One Cup frente al Middlesbrough tras una interminable tanda de penaltis. El Everton, por su parte, tampoco había arrancado de la mejor manera la temporada, con una única victoria en las cinco primeras jornadas, sufiendo en la última una dura derrota en su visita al Liberty Stadium (3-0 frente al Swansea).

2. Planteamientos


Brendan Rodgers utilizó uno de los diferentes esquemas que maneja de forma habitual su equipo; el 4-2-3-1. El técnico norirlandés tenía algunas bajas importantes, principalmente la de Sturridge, aunque tampoco pudo contar con otros hombres con peso como Glen Johnson o Joe Allen. Así, el Liverpool formó con Mignolet en portería, Manquillo lateral derecho y Alberto Moreno lateral izquierdo, y pareja de centrales compuesta por Skrtel y Lovren. En medio campo, doble pivote para Gerrard y Henderson, con Lallana por delante. Las bandas fueron para Lazar Markovic -derecha- y Sterling -izquierda-, con Mario Balotelli como 9.

Roberto Martínez, por su parte, metió un centrocampista más de corte defensivo como Besic, con diferencia a lo que suele ser más habitual en el equipo. El planteamiento fue de repliegue y contragolpe. El Everton salió a Anfield en un concreto 4-3-3, con Howard en portería, Hibbert -Coleman era baja- como lateral derecho, Baines lateral izquierdo, y pareja de centrales para Stones y Jagielka -Distin también ausente-. En medio campo, Barry se quedó con el rol de pivote, mientras que McCarthy y Besic fueron la pareja de interiores. Por delante, Naismith era quien gestionaba el carril central, en un papel de falso 9, con Lukaku y Mirallas en posición de extremos, con el objetivo de atacar los espacios.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

El partido arrancó con un ritmo tremendo. El Liverpool puso mucho corazón e intensidad en los primeros compases, y eso le sirvió para sacar varios tiros a portería en esos minutos iniciales. Fue una puesta en escena más relacionada con el entusiasmo y el ambiente que con un plan futbolístico estable que abriese vías hacia Howard. Ninguno de los hombres ofensivos del Liverpool -Balotelli, Markovic, Lallana, Sterling- dio la sensación de relacionarse bien con sus compañeros, y esos disparos salían más por acciones individuales que por un plan colectivo efectivo. Además, el planteamiento del Everton ayudaba a que el Liverpool pudiera jugar cerca del área rival. Roberto Martínez ubicó a sus tres centrocampistas centrales cerca de la línea defensiva; por un lado evitaba que el Liverpool transitase con velocidad y espacios (Sterling más Markovic hubiesen sido devastadores en un contexto así), y por otro ataba el juego entre líneas de Balotelli y Lallana en el ataque posicional. Esa idea de Martínez permitía, además, ofrecer un escenario favorable a sus hombres de ataque. Naismith, como falso 9, administraba las recepciones por las zonas centrales, y hacía de lanzador para Mirallas y Lukaku, que debían de atacar los espacios a partir de sus posiciones abiertas, en la espalda de Manquillo y Alberto Moreno. 

El partido se movía en esa línea, aunque el Everton, salvo tramos puntuales del primer tiempo, no hacía efectivo su plan de contragolpe, y el choque sufrió un cambio de guión después de la primera decisión en dirección de campo de Rodgers: la entrada de Coutinho por Lazar Markovic. El futbolista serbio es rapidísimo, vertical y tremendamente dañino a campo abierto, y, sin ser un jugador espeso en los ataques posicionales, sí es cierto que su falta de jerarquía y la ausencia de un buen mecanismo colectivo provocaron que no terminase de aparecer para ofrecer soluciones. La entrada del brasileño -que se colocó como mediapunta, mandando a Lallana a la banda- ofreció agilidad y algo más de sentido a ese ataque organizado de los reds. 




En esos minutos centrales del segundo tiempo, cuando el Liverpool más claridad tenía en campo rival, apareció Steven Gerrard para, gracias a un gran golpe franco directo, poner el 1-0 en el marcador. El Liverpool controló el tramo final de encuentro con cierta solvencia -solo la entrada de Eto'o agitó mínimamente el ataque toffee-, y los locales se hubiesen llevado los tres puntos de no ser porque Jagielka se sacó un disparo soberbio que acabó poniendo las tablas en el marcador. En resumen, el Everton adaptó su planteamiento al Liverpool, tratando de que su rival no encontrase espacio entre líneas ni campo para correr, pero no pudo activar a sus hombres de ataque para encontrar buenas opciones al contragolpe. Al final, un gran disparo por cada bando acabó significando el 1-1.

4. Reacciones de los protagonistas

Brendan Rodgers (Fuente: Web oficial del club): "Creo que hemos mostrado una mejor versión hoy. La suerte no estuvo de nuestro lado, como demostró el momento en el que recibimos el gol, pero estoy muy orgulloso del rendimiento del equipo". 
"Tácticamente, estuvimos muy bien en el partido. Defendimos bien y llevamos la iniciativa. Fue decepcionante, pero nunca tuve la sensación de que el resultado peligrase. Creo que el equipo estuvo bien organizado y concentrado, y peligroso cuando tuvimos la pelota".
"El trabajo de Balotelli fue excelente, su presión y su físico en el último tercio de campo nos ayudó mucho. Parecía que podía marcar, y fue decepcionante que no lo hiciera, pero si mantiene esta línea de trabajo, acabará alcanzando su objetivo". 

Roberto Martínez  (Fuente: Web oficial del club): "Demostramos tener fe hasta el final, y eso nos dio recompensa".
"Hicimos un buen trabajo en defensa, aunque nos costó salir hacia delante. Como resultado, creo que es el mejor hasta el momento por lo que nos puede dar. Esto puede cambiar nuestra dinámica en la temporada".
"Creo que nunca he visto en directo un disparo mejor que el de Jagielka. Cómo ajustó el cuerpo y como conectó con el balón, como un delantero. Jagielka ha tenido un alto número de críticas injustas desde el exterior, y no hay mejor manera de responder a ellas que esto, porque además fue clave para nosotros defensivamente hablando". 

El nuevo tridente de Palermo


La primera vez que vi juntos a Miccoli, Pastore y Cavani fue en la segunda jornada de la Serie A 2009/2010. Era la segunda vez que Walter Zenga les ponía en el once, y recuerdo el partido con nitidez. Fue en el Artemio Franchi, frente a una Fiorentina que acababa de clasificarse para la fase de grupos de la Liga de Campeones tras eliminar al Sporting Clube de Portugal. El conjunto viola, dirigido por Cesare Prandelli, ganó 1-0 gracias al tanto de un incipiente Stevan Jovetic, pero, y con una sensación bastante parecida a la que está ofreciendo el Palermo actual, los sicilianos dejaron entrever que contaban con un trío ofensivo que acabaría dándoles muchas alegrías. 

Pastore llegaba a la Serie A después de haber sorprendido en las filas de aquel Huracán de Angel Cappa, que a punto estuvo de salir campeón del fútbol argentino. Edinson Cavani vivía su tercera temporada en el club rosanero, segunda como titular asentado, y la que sería de explosión definitiva que le llevaría destino Nápoles. Fabrizio Miccoli también cumplía su tercer año en Sicilia, después de una 2008/2009 a altísimo nivel. Un tridente -35 goles- que fue decisivo para lograr el quinto puesto que el Palermo alcanzaría a final de temporada, y que les llevaría a disputar el curso siguiente la Europa League.

Las miras del Palermo de Iachini, para esta temporada, están bastante alejadas del sueño europeo. El club que preside Maurizio Zamparini desde el año 2002 acaba de ascender de Serie B, y el lógico objetivo es asentarse en la primera categoría. De hecho, en este arranque de temporada, y a pesar de haber dejado buenas sensaciones, aún no conoce la victoria. En líneas generales los rosaneri han mostrado tener un buen plan colectivo y bastante organización, y si no han logrado mejores resultados ha sido por un déficit de calidad defensiva. Sin embargo, frente al Napoli los tres hombres de ataque mostraron poder ser lo suficientemente autoproductivos como para llevar al club a lograr sus objetivos.

No había sido la idea inicial de Iachini juntar a Dybala, Vázquez y Belotti, pero el buen sabor de boca que dejaron en el tramo final de partido contra el Inter invitó al técnico marquesano a utilizar a los tres de inicio frente al Napoli. El conjunto de Rafa Benítez tuvo un arranque de partido soberbio, pero gracias a la productividad del tridente rosanero el marcador acabó en un voluminoso 3-3. 

Dybala, Belotti y Vázquez, la temporada pasada en Serie B

Andrea Belotti (20 de diciembre de 1993) llegó al Palermo en el verano de 2013 procedente del Albinoleffe, en una operación de préstamo con derecho de compra del 50% de sus derechos fijada en 2,5 millones de euros, que el club siciliano ejerció en el pasado mercado de fichajes. Emiliano Mondonico, mítico técnico italiano recordado, sobre todo, por su gran trabajo al frente del Torino al comienzo de la década de los 90, era entrenador del Albinoleffe cuando Belotti jugaba en las categorías inferiores. Le definió como "Un jugador de primerísimo nivel. La primera vez que le vi comprendí que se trataba de un enorme talento. Puede hacer todos los roles del ataque -extremo, segundo punta-, pero debe jugar como primer delantero. Lo definiría como un delantero centro de la vieja escuela". Su naturaleza le hace realmente útil en este Palermo. Con Dybala-Vázquez, futbolistas a los que les gusta participar fuera del área, tener un delantero como Belotti, que hace movimientos verticales, tiene potencia para ganar choques y disputar juego directo, y que produce espacios y sujeta rivales, aumenta su productividad. Además, Belotti tiene talento para hacer goles: buen sentido para llegar a zona de remate y buen primer toque para finalizar. 

Franco Vázquez (22 de febrero 1989) fichó por el Palermo en agosto de 2011, después de varios años asentado en el primer equipo de Belgrano, y tras haber estado a punto de recalar en el Parma, acuerdo que no fructificó por diferencias entre el club italiano y su representante. Después de una primera temporada con escasa continuidad en el club rosanero, Vázquez se marchó cedido al Rayo Vallecano, donde Paco Jémez tampoco le convirtió en pieza clave. Fue en el último tramo de la temporada pasada, curso del ascenso, cuando Iachini le dio un papel protagonista en el fútbol europeo. Ya con esa dinámica proveniente de la Serie B, Vázquez ha sido titular en este arranque de curso en Serie A, y no cabe duda de que es uno de los hombres más importantes del esquema. Como segundo punta -en las primeras jornadas-, o metros más atrás, instalado en la zona de creación -como en el San Paolo-, está teniendo un peso decisivo en las acciones ofensivas del equipo. Es el futbolista más dotado de la plantilla para guardar la pelota y manejar los tiempos de la posesión, y a esas capacidades suma un alto nivel de confianza y un rol de referente dentro de la plantilla, que le hace ser primera opción para sus compañeros cuando estos sueltan la pelota.

Paulo Dybala (15 de noviembre de 1993) es la joya de la corona. Con 17 años comenzó a jugar en el primer equipo de Instituto de Córdoba, batiendo varios récords del club, y alcanzando la cifra en su primera temporada como profesional, en la B Nacional, de 17 tantos. Los 12 millones de euros que Zamparini desembolsó por el futbolista fueron cifra récord en el Palermo, y por supuesto vista con escepticismo por bastantes analistas. De hecho, en las dos primeras temporadas de Dybala hubo que darle la razón a los críticos, después de un primer curso en el que el club acabó descendiendo a Serie B, y tras una temporada en la segunda categoría en la que al argentino le costó arrancar. Sin embargo, su inicio de temporada 14/15 está siendo brillante. Solo logró marcar en la primera jornada frente a la Sampdoria, pero su incidencia en el juego está yendo bastante más allá. Como primer punta se las ha ingeniado para, siendo bastante móvil, tener peso en creación de las jugadas ofensivas, aunque el día que mejor ha rendido ha sido con toda libertad, por detrás de Belotti, en el partido frente al Napoli. Ahí Dybala dominó las transiciones de su equipo, ofreció toques entre líneas siempre productivos, y además fue determinante con una gran asistencia para el 3-3 final. Veremos si Iachini le mantiene en ese papel, aunque en cualquier caso está dejando enormes actuaciones aún siendo único 9. Con la evolución óptima, tiene talento para entrar en el grupo de futbolistas dominantes de una gran liga.

Es pronto para comparar, y desde luego el contexto de aquel Palermo, un club ya asentado en Serie A, no tenía nada que ver con el actual de equipo recién ascendido. Sin embargo se palpa la ilusión en la isla, y gran parte de culpa la tiene un tridente joven, con mucho talento y al que le sobra hambre y ganas de crecer. 

martes, 23 de septiembre de 2014

Old Trafford y la libreta de van Gaal

La derrota del Manchester United frente al Leicester City ha disparado las alarmas. Es cierto que el arranque de Louis van Gaal en Old Trafford ha sido, en líneas generales, muy negativo, pero también lo es que esas primeras derrotas se produjeron con algunos de los fichajes estrella sin haber aterrizado, y con un plan colectivo aún por definir. El técnico holandés llegó a Manchester después de un excelente rendimiento en el mundial de Brasil al mando de su selección, y desde el primer momento trató de seguir las bases del esquema que llevó a los Países Bajos a alcanzar la medalla de bronce. 


En los cuatro primeros partidos oficiales se mantuvo esa base. La idea parecía clara: juntar a Rooney, van Persie y Mata, y que los tres pudieran jugar en sus mejores roles. Este era el pilar que justificaba la decisión, aunque sobre la práctica vimos que en ningún momento la idea del 5-3-2 cuajó. 

En la primera jornada, frente al Swansea, las sensaciones positivas fueron a parar del lado de la presión inicial. El equipo se situaba sin balón bastante junto a buena altura, y durante el primer tiempo el conjunto galés salió sin demasiada continuidad a campo rival, porque no conseguía que Sigurdsson, su mediapunta, recogiese el cuero en la espalda de Fletcher y Ander Herrera. Pero más allá de eso -cuestión que se rompió a partir del 0-1-, el equipo ofreció poco. Los hombres de banda -Lingaard/Januzaj y Young- quedaban demasiado alejados de los centrocampistas, y los diablos rojos no conseguían juntar gente para progresar en bloque hasta la meta rival. 

En la segunda jornada, contra el Sunderland, ese problema se acrecentó, porque Ander Herrera, el futbolista que mejor entendió el día inaugural como acercar la pelota a Mata y a Rooney, era baja. Fletcher y Cleverley naufragaron en esa función, y en los costados, esta vez, se evidenció un problema que dado el tipo de defensa -un 4-5-1 compacto- que hacía el rival, embotelló al Manchester United: Valencia y Young apenas hacían movimientos verticales, y eso sumado a los continuos movimientos de apoyo de Mata y Rooney, provocó que la sensación de profundidad fuese nula. 

En el partido de Capital One Cup frente al MK Dons, a pesar de que fuesen muchos los suplentes alineados, quedó claro uno de los principales problemas que ha tenido el equipo en este inicio de curso: las pérdidas en la salida de pelota. Van Gaal ha querido iniciar el juego en corto, y la plantilla tiene un déficit importante para que esta propuesta sea efectiva. Tres de los cuatro goles del MK Dons fueron fallos directos en este aspecto.

En la tercera jornada, frente al Burnley, hubo un cambio importante, y fue la entrada en el once de Ángel Di María. Eso varió la estructura en medio campo, que pasó de ser de 2+1 (dos pivotes y Mata por delante) a 1+2 (un pivote -Fletcher- y dos interiores -Mata y Di María-). El Manchester United mantuvo los problemas en la salida de pelota, y lo más positivo del choque fue la energía de Di María, que se fue apagando con el paso de los minutos.


En la jornada 5, contra el QPR, llegó el oasis de la temporada. Van Gaal cambió el sistema, pasó a jugar un 4-4-2 en rombo, e hizo debutar en el once a Rojo, Blind y Rafael. Es cierto que el QPR está siendo uno de los conjuntos más caóticos de la Premier League hasta el momento, pero también lo es que el equipo, en ese partido, dio su mayor sensación de armonía. Daley Blind dio un rendimiento soberbio como pivote, Ander Herrera, ofreciendo apoyos, movimientos más cortos y toques más sencillos, y Di María, abriéndose, conduciendo la pelota y desequilibrando las líneas rivales, se mostraron como una pareja de interiores compatible, mientras que Mata y Rooney funcionaron bien, ya dentro de un partido que se movió en la línea del control a través de posesiones más largas y pausadas.

Pero en la jornada 5, frente al Leicester City, llegó la gran debacle del curso. Fue la derrota más dura porque el equipo llegaba con la sensación de estar encauzando su camino. El único cambio en el once con respecto al partido frente al QPR fue la entrada de Falcao por Mata, que hizo a Rooney retrasar su posición. El comienzo de choque fue, en el plano ofensivo, soberbio. Di María y Falcao dejaron claro que son estrellas a nivel internacional, y la productividad del equipo en base al talento de ambos fue suficiente para que mediada la segunda parte el marcador fuese de 1-3. Sin embargo, el desequilibrio colectivo y la falta de calidad en la línea defensiva acabaron poniendo el durísimo 5-3 final. Por un lado, Pearson calcó el diamante de van Gaal, situando a Nugent encima de Blind, y utilizó a dos puntas -Ulloa y Vardy- en lugar de los extremos habituales. Vardy se coló como cuchillo en mantequilla en el sector de Rojo y Blackett, y lo que debería de haber sido un día para refrendar sensaciones, acabó volviéndose un mar de dudas. 

Valoraciones generales

El principal tema de debate está en la línea defensiva. En primer lugar, el gran problema que evidenció el equipo en ese tramo inicial -es decir, hasta el cambio de esquema-, fue una salida de pelota deficiente. Evans, Jones, Smalling y Blackett no han demostrado ser un recurso para que ese inicio en corto aporte más soluciones que problemas. Sin embargo, esta carencia se ha visto en parte resuelta a partir del paso al 4-4-2 -y eso que aún falta Shaw, un lateral que sumará en este sentido-. Es cierto que la pareja de centrales sigue siendo Evans-Blackett, pero la figura de Blind -sobre todo lo vimos frente al QPR- aclara el panorama. Puede acercarse y ser protagonista del primer pase, quedando en ocasiones detrás de los dos centrales, y el futbolista holandés sí tiene sentido y un buen primer toque para ser productivo ahí. El otro activo que ha sumado en este sentido es Rafael. Su capacidad técnica ayuda a no perderla en la fase de salida. Sin embargo, la calidad individual de la defensa es lo que está, con toda lógica, en entredicho. Rojo fue excesivamente permisivo contra el Leicester City, y eso, si no tienes a un corrector de primer nivel, puede acabar en desastre. Blackett no solo no lo fue, si no que además midió mal su posición y sus acciones. El Manchester United no tiene el suficiente equilibrio con balón como para poder permitirse exponer con tanta frecuencia a su línea defensiva. 

Ese equilibrio con balón abre el siguiente punto de debate: la suplencia de Mata. El burgalés salió del Chelsea debido a un papel secundario -justificado por el tipo de juego que propone Jose Mourinho, más vertical y reactivo- y buscó acomodo en un indefinido Manchester United de David Moyes. Si bien es cierto que esa salida de Londres tenía concordancia con las prestaciones del futbolista, no parece demasiado lógico que Mata no tenga un rol más importante en este proyecto de van Gaal. Siendo uno de los interiores Ángel Di María -que es, sin duda, brillante para crear desequilibrio en el rival-, su presencia supone inevitablemente un riesgo, porque su tipo de juego -regates, conducciones, dinamismo, nula pausa- hace que exista más posibilidad de perder la pelota. Si van Gaal decide terminar de armar el equipo con Rooney-van Persie-Falcao, quienes, por mucho que el inglés sea un genio yendo a los apoyos, son delanteros, esa electricidad y movimientos verticales para acabar finalizando jugadas lo más cerca del área rival se van a acrecentar.  La figura de Mata podría anestesiar los ataques, dar algo más de control y encajar perfectamente con las otras dos líneas de pase menos arriesgados que ya están asentadas: la que ofrece Blind en una altura, y Ander Herrera en una posterior. Desde luego, no debe de ser fácil para van Gaal otorgar a van Persie un rol secundario, pero quizá sea lo que más encaje con la situación actual. 

Estos son, quizá, los dos grandes temas de debate en este momento. La falta de calidad defensiva individual es algo que a día de hoy no se puede resolver, y veremos si con minutos, Smalling y Phil Jones, dos futbolistas fichados en su día por Alex Ferguson para completar plantilla y preparar el futuro, acaban dando el paso adelante necesario. Si no, la opción será acudir al mercado invernal, pero mientras sucede una cosa u otra, la gran prueba para van Gaal será lograr un equilibrio que permita atacar igual de bien que las dos últimas jornadas, sin exponer tanto a su débil línea defensiva. 

lunes, 22 de septiembre de 2014

Lunes de resaca

Debacle del Mancester United en Leicester (Foto: Reuters)

1. Inglaterra

El gran partido del fin de semana en Inglaterra era el Manchester City - Chelsea, que acabó en 1-1 y que no decepcionó. Un partido de altísimo nivel que acabó desequilibrándose gracias, primero, a un fantástico contragolpe del equipo visitante, y que volvió a las tablas, después, tras el que será uno de los momentos de la temporada en el fútbol inglés: un gol de Frank Lampard al Chelsea.  

Y no fue el partido del fin de semana en las islas, pero sí la noticia: durísima la derrota que sufrió el Manchester United frente al Leicester City (5-3). El choque arrancó de fábula para los de van Gaal, con fantásticas actuaciones de Di María y Falcao, pero la inestabilidad del equipo, la poca calidad defensiva que tiene el once y un buen planteamiento de Pearson, acabaron siendo decisivos en el resultado final. 

El Arsenal visitaba a un Aston Villa que sumaba 10 puntos de 12, y lo hacía tras caer en Dortmund dejando muy mala imagen. Sin embargo, las dudas se disiparon. 0-3 para los de Wenger, con un Özil más centrado, que acaparó los elogios al término del choque. Los gunners, que no ganaban desde la jornada uno, vuelven a sumar tres puntos en Premier League.

La pasada temporada el Liverpool perdió seis partidos ligueros, y en esta, cuando se han disputado cinco fechas, ya ha caído tres veces. Derrota 3-1 frente a un West Ham que, a través de su planteamiento, logró dos goles rápidos que pusieron el choque demasiado cuesta arriba. Rodgers cambió a defensa de tres centrales y consiguió detener la sangría, pero la mejoría ofensiva solo llegó con Lallana y no fue suficiente para igualar el choque.

Y para terminar, destacar dos derrotas como locales de dos equipos que a priori deberían de, a pesar de que otros clubes tengan más obligación, pelear por la cuarta plaza: el Everton cayó en Goodison Park (2-3) frente al Crystal Palace, mientras que el Tottenham lo hizo (0-1) frente al West Bromwich Albion.  



2. Italia

Se jugó uno de los grandes clásicos del fútbol italiano: Milan - Juventus, que acabó con victoria (0-1) para los bianconeri. Los de Allegri fueron muy superiores, y a pesar de que el Milan a través de una buena defensa interior y Menez fue capaz de competir durante muchos minutos, al final la calidad (preciosa combinación entre Pogba y Tévez para el gol), acabó siendo decisiva en la victoria visitante. 

La Roma de Rudi Garcia llegaba tras la exhibición europea en Liga de Campeones frente al CSKA, y no le costó sacar los tres puntos en Serie A. Ganó 2-0 al Cagliari, en el que era el regreso de Zeman al Olimpico, y lo hizo tras un arranque de partido muy solvente. Gervinho, que no marcó, fue clave en los tantos de Destro y Florenzi.

Segunda derrota en tres jornadas para uno de los que estaba llamado a ser candidato al Scudetto: el Napoli se dejó los tres puntos en el desangelado -está en plenas obras- Friuli. Udinese con varias bajas le ganó 1-0, y Stramaccioni aseguró que el cambio a defensa de cuatro tuvo algo que ver con las ausencias, pero también con enfrentarse a un rival que utilizaba tan bien los costados para atacar. 

El Inter no logró pasar del empate a uno en su visita a Palermo, aunque pudo recuperarse del fallo de Vidic que puso en ventaja a los locales. Mazzarri buscó la victoria en el tramo final deshaciendo su casi inamovible defensa de tres centrales, pero los nerazzurri no lograron encontrar buenas posiciones de tiro, más allá del balón parado. 

Primera victoria -y primer gol- en Serie A para la Fiorentina, que llegaba tras una buena actuación frente al Guingamp en Europa League. El partido dejó el gol de Kurtic, un centrocampista más agresivo, dinámico y vertical que la media de la plantilla, lo que le permite ser útil, y el preocupante arranque de Mario Gomez, que no solo no marca, si no que produce poco.



3. Alemania

Segundo empate del Bayern en cuatro partidos, este en su visita a un Hamburger SV que vivía su primer partido tras la destitución de Slomka. Rotó Guardiola -Pizarro, Shaqiri o Hojberg fueron titulares-, y al equipo le costó encontrar situaciones de gol con continuidad. Las entradas de Götze, Lewandowski y Xabi Alonso no fueron suficientes para deshacer el 0-0. 

El Borussia Dortmund cayó en su visita al Mainz 05 (2-0). A los de Klopp les costó encontrar producción en el ataque posicional, algo a lo que obligó el planteamiento de Hjulmand, que nunca dejó que las flechas amarillas pudieran transitar con velocidad. En el tramo final Immobile falló un penalti que hubiese significado el 1-1, aunque el gran protagonista fue Jairo Sampiero que, aunque no los metió, produjo los dos goles de su equipo.

Una de cal y otra de arena para el Schalke 04 de Jens Keller, que después de obtener un sorprendente empate en su visita a Stamford Bridge entre semana, se dejó puntos (2-2) frente al Eintracht Frankfurt. El Eintracht, en base a un repliegue poco habitual en los equipos de Schaaf, negó espacios a los locales y encontró dos acciones aisladas para poner un 0-2 que al final acabó igualando el Schalke sin demasiada lucidez. 

Y duro revés el que sufrió el que venía siendo uno de los equipos más atractivos en este arranque de Bundesliga: el Bayer Leverkusen de Roger Schmidt perdió 4-1 en su visita al Wolfsburg. Los de la aspirina jugaron con 10 desde el minuto 7 por expulsión de Donati -quien desplazó a Jedvaj al centro de la zaga- y en el segundo tiempo la balanza terminó de desequilibrarse, con un espectacular rendimiento de Ricardo Rodríguez. 



4. Francia

En Ligue 1, a destacar el choque entre PSG y Olympique Lyonnais que acabó en empate a 1. Fournier basó su planteamiento en en impedir una salida limpia del PSG, que solo encontraba cierta progresión en los carriles exteriores, y de forma muy puntual. A cambio, el Lyon logró transitar por las bandas gracias a la velocidad de sus puntas, y al final encontró el empate en un córner tras una de esas contras. 

Aunque la noticia, al margen del partidazo de la jornada, es que el Olympique Marseille de Marcelo Bielsa es líder de la competición. Cuarta victoria consecutiva tras deshacerse (3-0) del Stade Rennes de Montanier. El OM, con un once prácticamente asentado, está encontrado la estabilidad colectiva, mientras que los Payet, Ayew, y sobre todo Gignac (6 goles en 6 jornadas) deciden el marcador. 

En el resto de la jornada, hay que destacar que el Monaco le ganó al Guingamp 1-0 -segunda victoria en Ligue 1 y segunda victoria consecutiva tras batir al Leverkusen en UCL-, mientras que Bordeaux (2-1 vs Evian) y Saint-Etienne (0-1 vs Lens), mantienen su buena dinámica en este comienzo, sumando los mismos puntos que el líder. 



5. Otras ligas

Fin de semana de clásicos, y a destacar el que disputaron en la Eredivisie Feyenoord y Ajax. El choque acabó en victoria para los ajacied (0-1) en un partido que debió, sin exagerar, acabar en goleada para los locales. El conjunto de Fred Rutten tuvo un arranque de partido absolutamente avasallador (3 largueros en 10 minutos), pero fue el Ajax quien a través de un disparo lejano de van Rhijn quien abrió el marcador. El desacierto de los hombres de ataque, y el buen papel de Cillessen, provocaron la derrota del Feyenoord.

Y en Argentina, duelo en lo alto de la tabla, en uno de los grandes clásicos del país. River e Independiente se enfrentaban en el Monumental, y el conjunto de Marcelo Gallardo se refrendó como el equipo más fuerte de la competición. River ganó 4-1, mostrando la que están siendo sus grandes cualidades hasta el momento: agresividad en la presión y una gran versatilidad ofensiva, siendo capaz de atacar los espacios con velocidad, y mostrando un buen nivel asociativo cuando la ofensiva ha de ser más pausada. 

domingo, 21 de septiembre de 2014

Análisis de partidos: Manchester City 1-1 Chelsea

1. Contexto y datos del partido

Jornada 5 de la Premier League: Manchester City 1 (Lampard) - Chelsea 1 (Schürrle)

Datos del partido (Fuente: www.squawka.com)

El Manchester City llegaba al partido tras perder en su visita al Bayern München en la primera jornada de la Champions League, y las sensaciones generales tampoco venían siendo muy positivas, puesto que los últimos dos choques ligueros se saldaron con derrota (frente al Stoke City) y empate (frente al Arsenal). El Chelsea, por su parte, afrontaba el choque habiendo hecho pleno de puntos en la Premier League, aunque en el primer partido de la Champions League concedió un empate frente a un Schalke 04 que visitó Stamford Bridge con bastantes bajas. 

2. Planteamientos

Manuel Pellegrini eligió el 4-4-2 para este partido, lo que es noticia relevante puesto que en los choques frente a rivales más fuertes habíamos visto con relativa frecuencia, sobre todo en el tramo final del curso pasado, a David Silva por detrás de un punta. De esta forma, el Manchester City formó con Hart en portería, Zabaleta lateral derecho y Kolarov lateral izquierdo, y pareja de centrales formada por Kompany y Mangala -este último debutaba-. En medio campo, doble pivote para Fernandinho-Yaya Toure (Fernando era baja), con Milner ocupando el carril derecho y Silva partiendo del izquierdo. El once lo completaron, como pareja de puntas, Dzeko y Agüero. 

Jose Mourinho salió en un 4-4-1-1, también realizando algún ajuste con respecto a lo que se esperaba en las previas. El Chelsea salió con Courtois en portería, defensa completamente asentada compuesta por Ivanovic como lateral derecho, Azpilicueta como lateral izquierdo, y pareja de centrales formada por Cahill y Terry. En medio campo, el técnico portugués salió con doble pivote, Matic como elemento más posicional, y Fabregas a su lado. La banda derecha fue para Ramires y la izquierda para Eden Hazard. Willian fue titular para jugar como enganche, con Diego Costa en su papel habitual de delantero centro. 


3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

Jose Mourinho diseñó una alineación para, presumiblemente, tratar de transitar con velocidad a partir de la posición centrada de Willian a espaldas del doble pivote rival, además de, por supuesto, las posibles conducciones de Eden Hazard. De ahí se puede leer la posición de Fabregas en el doble pivote -para tratar de, con su capacidad de pase, encontrar al futbolista brasileño entre líneas-, y a partir de ahí lograr un último pase que permitiera a Diego Costa correr en uno contra uno frente a Hart. Al Chelsea no le importó replegar, como ya hemos visto en la etapa Mourinho frente a equipos grandes, para tratar de correr después, aunque frente al Manchester City esto no pudo ocurrir con frencuencia. El acierto de la pareja de centrales del conjunto local en ese primer tiempo, principalmente de Mangala, resultó decisivo.

Datos del partido de Mangala y Kompany (Fuente: www.fourfourtwo.com) - Click para agrandar

La altura a la que achicaban los centrales resultó clave para que el Chelsea no pudiera encontrar recepciones entre líneas, y de esta forma lanzar a sus hombres de arriba -principalmente a Diego Costa, aunque la posición de Ramires en derecha, además de para vigilar a Silva, ofrecía también la opción de encontrarle al espacio-. Solo hay que ver las acciones defensivas de Mangala en la captura mostrada: no solo estuvo acertado en su campo sobre el sector izquierdo, también en campo rival en todo el eje horizontal. Su agresividad resultó decisiva para evitar que Diego Costa estuviese cómodo tras una recepción de espaldas, y ayudó a evitar que la zona de 3/4 del Chelsea quedase activada. La defensa del Manchester City lució en base a esta defensa agresiva, pero la del Chelsea también fue muy efectiva viviendo más cerca de su área. Lo cierto es que el partido, hasta la expulsión de Zabaleta, se movió en la línea habitual que solemos ver en la Champions League cuando llegamos a su etapa final: dos equipos con un altísimo acierto defensivo, negando espacios y corrigiendo acciones con una calidad tremenda. 

La expulsión de Zabaleta, sin embargo, desequilibró el sistema del Manchester City, y en esa fase de desajuste el Chelsea cazó un contragolpe de libro para poner el 0-1. Mourinho había dado entrada a Schürrle y Obi Mikel por Ramires y Willian, adelantando a Fabregas a la mediapunta, y ganando con el alemán en banda una opción de más calidad para finalizar jugada, como se vio en la acción del 0-1. El Chelsea había encontrado un gol que, viendo el nivel que estaba mostrando en defensa hasta el momento, y sumado el hecho de jugar con un hombre más, parecía destinado a darle la victoria. Sin embargo, Pellegrini se movió bien, optimizando los 10 futbolistas que tenía en el terreno.



El chileno mandó a Milner a ocupar todo el carril izquierdo, pero a su vez fijó a Jesús Navas en la derecha, y a Silva lo ubicó de falso extremo izquierdo. La atracción que el canario hizo sobre Ivanovic permitió a Milner tener situación de uno contra uno frente a Schürrle, un futbolista de peores conceptos defensivos que Ramires. Eso, sumado a la entrada de Lampard, un jugador de enorme lectura para pisar área, acabó significando el 1-1 final. En resumen, choque de altísimo nivel físico, táctico y técnico, que acabó desequilibrándose por una expulsión, y que acabó en empate gracias a una buena lectura en la dirección de campo de Manuel Pellegrini.

4. Reacciones de los protagonistas

Jose Mourinho (Fuente: Web oficial del club): "Fue un punto ganado porque llegamos aquí a dos puntos del segundo clasificado y nos vamos tres por encima. Miro a la tabla y somos líderes". 
"Fue una muy buena actuación. Diego Costa dio un palo con 0-1, y cuando no matas los partidos estás en peligro, especialmente contra los buenos equipos. Nosotros tuvimos una reacción táctica para tratar de ganar el partido, ellos tuvieron una reacción emocional para tratar de no perderlo". 

Manuel Pellegrini (Fuente: Web oficial del club): "Estoy satisfecho por la actuación, pero no por el resultado. Creo que intentamos ganar en todo momento frente a un equipo que se comportó como un equipo pequeño, y que intentó defenderse poniendo 10 jugadores delante de su portería. El equipo que intentó ganar tuvo dos o tres ocasiones muy buenas para marcar, sobre todo en la segunda parte. Incluso después de quedarnos con 10 hombres seguimos intentando ganar. Para mi ha sido muy importante ver que el equipo jugó con 10 igual a como lo estaba haciendo con 11".

sábado, 20 de septiembre de 2014

Análisis de partidos: Milan 0-1 Juventus

1. Contexto y datos del partido


Jornada 3 de la Serie A: Milan 0 - Juventus 1 (Tévez)

Datos del partido (Fuente: squawka.com)

El Milan llegaba al choque después de haber dejado buenas sensaciones, a nivel ofensivo, en las dos primeras jornadas. El último partido fue un frenético 4-5 en el Ennio Tardini contra el Parma, con exhibición de Jeremy Menez. La Juventus, por su parte, había vencido con solvencia los dos primeros compromisos, manteniendo la dinámica que habíamos visto durante la etapa de Antonio Conte. 

2. Planteamientos

Filippo Inzaghi formó con el 4-3-3 que está siendo habitual en el Milan en este inicio de temporada. Diego López era baja por una lesión muscular, y Fernando Torres llegaba renqueante tras un esguince de tobillo. Así, el conjunto rossonero formó con Abbiati en portería, Abate como lateral derecha y De Sciglio como lateral izquierdo, y Rami-Zapata como pareja de centrales. En medio campo, de Jong mantuvo su posición como pivote en la línea de tres centrocampistas, con Poli como interior derecho y Muntari interior izquierdo. El resto del once lo completaron Menez, en ese rol de falso 9 que Inzaghi le está dando en este inicio de curso, Honda, partiendo en posición de extremo derecho, y El Shaarawy, en la de extremo izquierdo. 

Massimiliano Allegri, por su parte, también tenía bajas relevantes -principalmente la de Pirlo-, aunque Arturo Vidal tampoco pudo ser titular por llegar tocado. La Juventus formó con su 3-5-2 habitual, con Buffon en portería, Cáceres central derecho, Chiellini central izquierdo y Bonucci central medio. En medio campo, Marchisio jugó como pivote, en el rol habitual de Pirlo, con Pereyra como interior derecho y Pogba interior izquierdo. La banda derecha fue para Lichtsteiner y la izquierda para Asamoah, y completaron el once Tévez y Llorente como pareja de puntas.

3. Desarrollo, posibles claves y dirección de campo

La Juventus controló el partido desde el primer momento, robando con bastante continuidad en campo contrario y terminando jugadas. Durante el primer tiempo, eso sí, el Milan compitió bien, y lo hizo en base a dos claves: controlar el juego interior de la Juventus, donde suelen lucir Tévez y Pogba, y saliendo con relativa continuidad gracias a su mejor hombre, Jeremy Menez. Por un lado, buen trabajo de los tres centrocampistas centrales del Milan, que protegieron bien al equipo de esos toques entre líneas. De Jong lució bastante en este cometido, estando muy pendiente de evitar las habituales recepciones de Tévez, en ocasiones saliendo a buscarle a zonas bastante alejadas. Esto restó calidad a los ataques de la Juventus que, no obstante, tenía recursos de sobra para producir ocasiones a pesar de ello. La productividad exterior de Lichtsteiner y Asamoah, el juego directo sobre Llorente, que ofreció soluciones de continuidad jugando de espaldas, o el remate lejano de Marchisio o Pereyra significaron un buen número de oportunidades en el primer tiempo. El Milan pudo hacer más intermitentes las fases de dominio visitante gracias a Menez. 

Mapa de calor de Jeremy Menez (Fuente: squawka,com)

La captura muestra la movilidad de un Menez que actuó prácticamente todo el partido como 9 -la entrada de Fernando Torres le retrasó a la mediapunta-, y en él se observa que tuvo bastante presencia en campo propio. Esto fue consecuencia de que Menez no buscó recepciones a los espacios (el Milan apenas tenía opción de dejar a un lanzador libre) y el francés se retrasaba para oxigenar las posesiones milanistas. Ahí, con un control, un regate o un toque preciso, permitía al Milan salir de campo propio. No tuvo el conjunto de Inzaghi demasiadas ocasiones, pero al menos conseguía posarse en alguna ocasión en campo rival y pausar las fases de la Juventus con el balón dominado cerca del área de Abbiati, que de una forma u otra acababan en oportunidad de gol. 

El segundo tiempo mantuvo la misma dinámica, hasta que Tévez y Pogba consiguieron conectar una vez por dentro. La ocasión que salió de esa combinación ya fue de primera calidad, porque dejó al argentino mano a mano frente a Abbiati, y este no perdonó. A partir de ahí la dinámica de partido cambió, porque Inzaghi fue introduciendo cambios ofensivos y el choque vivió en un ida y vuelta más constante, donde la zancada y la exuberancia física de Pogba comenzó a imponerse. El Milan, a pesar de juntar mucha gente ofensiva en el campo -acabaron el duelo Menez, Torres y Pazzini- no fue capaz de tener productividad ofensiva, y la Juventus acabó llevándose los tres puntos. En resumen, vimos una Juventus muy superior de principio a fin, y el Milan se mantuvo con vida mientras limitó el juego entre líneas juventino, y pudo desplegarse mientras Menez tuvo fondo para participar con continuidad. 

4. Reacciones de los protagonistas

Massimiliano Allegri (Fuente: www.tuttojuve.com): "No ha sido un partido fácil porque el Milan se ha defendido con mucho orden, y además nos han creado problemas al contragolpe. Sin embargo hemos estado bien, hemos tenido paciencia".
*Pregunta: En la segunda parte Pogba ha jugado más adelantado y esto ha provocado que Abate tuviera que marcarle. En consecuencia Honda ha tenido que ocuparse de Asamoah y el Milan ha perdido profundidad en la banda derecha: "Es una valoración correcta. En el primer tiempo de Jong vigilaba bien a Tévez, así que le pedí a Pogba que se separase para darle más espacio a Tévez. Tévez ha entendido bien la situación".

Filippo Inzaghi (Fuente: www.milannews.it): "Rami y Zapata han hecho un gran trabajo, igual que de Jong. Tenemos que estar orgullosos de nuestra respueste, e incluso, teniendo algo más de acierto en el remate podríamos haber empatado el partido".
"Jugando 4-3-3, especialmente teniendo un jugador como Menez haciendo de primer punta, debemos de pedir a nuestros interiores (hoy Muntari y Poli) que pisen más área".